Guevara asume con «orgullo» el «rol diferente» que le toca como uno de los capitanes del Alavés
El medio vitoriano portó el brazalete ante Osasuna y volverá a ser uno de los líderes albiazules este curso
El regreso de Ander Guevara al Deportivo Alavés en 2023 fue «algo único». «Me apetece este reto. Hay un componente de responsabilidad porque vuelvo a ... mi ciudad», confesó el medio vitoriano de 27 años, que se convirtió al instante en uno de los líderes de Mendizorroza.
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El ex de la Real Sociedad encontró «mucha continuidad» de albiazul. «Clave e imprescindible», como apuntó Luis García, Guevara disputó 37 partidos y 2934 minutos en la pasada Liga, en los que marcó un gol y dio una asistencia. Fue el jugador de campo con más tiempo de juego y el segundo de todo el equipo, únicamente superado por Sivera (3060).
Fue el metrónomo que marcó el ritmo de un Alavés que no desafinó alcanzando el décimo puesto. Pero no sólo tejió pases. En sus primeros kilómetros de albiazul, el vitoriano ya ejerció de 'jefe' tanto en la medular como en la caseta. Sin embargo, el brazalete fue un accesorio secundario y de los minutos finales de los partidos, al estar en la jerarquía por detrás de Duarte, Rioja y Benavídez.
«Sé que este año quizás me tocará asumir un rol diferente, el cual cojo con muchas ganas y orgullo al ser en el equipo de mi ciudad»
Ander Guevara
Medio del Alavés
Un ecosistema que ha variado este verano en el vestuario albiazul. La marcha del lateral izquierdo a Pumas y las dudas sobre la continuidad del extremo andaluz han aumentado sus galones. «Por lo que comenta el míster estoy entre los capitanes», apuntó Guevara tras sudar bajo los 38 grados de Tajonar con el brazalete puesto.
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El medio disputó los 90 minutos del triunfo (1-2) ante Osasuna con el que el Alavés cerró la pretemporada luciendo la ikurriña en su brazo izquierdo. «No me considero el primer capitán. Sé que este año quizás me tocará asumir un rol diferente, el cual cojo con muchas ganas y orgullo al ser en el equipo de mi ciudad», explicó Guevara.
Manu García y Pablo Gómez
«Cuando me toque lo intentaré hacer lo mejor posible», afirmó el medio, sucesor, por posición y jerarquía, del último gran capitán vitoriano. Y es que entre 2012 y 2021 Manu García fue el líder de un Alavés con el que logró el ascenso a Segunda y a Primera alcanzando, además, la final de la Copa del Rey. Después de nueve años y 308 partidos, únicamente superado en el ránking de más choques con la camiseta alavesista por Astudillo (346), el brazalete pasó a manos de Laguardia primero y de Duarte después.
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Anteriormente, otro vitoriano como Pablo Gómez, tercer futbolista con más duelos (295) en la historia del Alavés después de dos etapas (1995-96 y 1997-04), fue capitán en el siglo XXI. Guevara, que se ha vaciado durante los ocho partidos de «una pretemporada exigente, de mucho trabajo, en la que el equipo desde el primer día se ha implicado mucho mostrando un gran esfuerzo y trabajo colectivo», asumirá, cuando se dé, «encantado y orgulloso» este reto.
«A la afición le digo que soy albiazul y tengo contrato para largo», señaló al principio del verano ante posibles ofertas. En Vigo, en el estreno liguero, Guevara volverá a ser el motor albiazul y a ejercer de líder en el medio junto a Blanco y Benavídez. Veremos si lo hace, o no, con el brazalete en el brazo.
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Guevara cumple con las expectativas
Guevara ha cumplido punto por punto lo que había avisado Sergio Fernández tras culminar su fichaje. «Nos va a aportar canalización del juego en sus inicios, donde necesitamos que salga con fluidez, con criterio y limpio. Nos va a dar también personalidad, experiencia, bagaje, templanza...», explicó entonces el director deportivo. Y el vitoriano dirigió el tráfico en el medio en la 2023-24 siendo el gran pasador albiazul (1456 envíos) sin olvidarse de limpiar la sala de máquinas: fue el futbolista que más faltas cometió (48) del equipo.
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