Denis Suárez se acerca al Alavés

El entrenador argentino, con quien coincidió en Vigo y despuntó a lo largo de dos temporadas (69 partidos, 4 goles y 12 asistencias), ha sido crucial en su carrera. Fue la etapa en la que Suárez recuperó el brillo y tuvo más continuidad tras pasar por algunos de los clubes más potentes de Europa, incluido el Manchester City o el Sevilla, con el que conquistó la Europa League. El papel del Chacho, con el que Suárez mantiene una buena relación y un contacto fluido, ha resultado clave para acelerar su llegada a Vitoria y la ofensiva final del Alavés, que vuelve a apostar por un perfil versátil, capaz de actuar en la banda izquierda y en el centro del campo como Aleñá. Además, Denis sabe asociarse y construir el juego, una faceta muy demandada por el entrenador argentino para su plantilla y su fútbol combinativo.

El Alavés se llevará así una puja en la que partía en desventaja por el firme interés de equipos que el futbolista ya conocía, como el propio Celta, o entidades con mayor músculo económico de la Premier League inglesa o del fútbol árabe. Sin embargo, el jugador prioriza continuar en LaLiga por encima de propuestas financieramente más lucrativas. En este sentido, las dificultades económicas del Celta para abordar la operación y su posterior inscripción, ante la imposibilidad de dar salida a futbolistas como Aidoo y Cervi que comprimen su límite salarial, han decantado la balanza a favor del club babazorro.

El director deportivo albiazul, Sergio Fernández, reconoció este miércoles en la presentación de Jon Pacheco que Denis Suárez es un futbolista que «gusta» en las oficinas del Paseo de Cervantes, aunque no ocultó las dificultades para acometer su fichaje «por su nivel» futbolístico y la competencia de otros conjuntos. Sin embargo, la operación, a la que le quedan algunos flecos por cerrar, avanza con paso firme hacia su desenlace. Además, el Villarreal, propietario de los derechos del gallego, no pondrá dificultades para la salida del jugador, sin hueco en la plantilla de Marcelino a un año de la finalización de su contrato.

Salvo giro inesperado, todo apunta a que Suárez se convertirá en el décimo fichaje del Alavés en lo que va del verano tras las incorporaciones de Carles Aleñá, Calebe Gonçalves, Lucas Boyé, Yusi Enríquez, Mariano Díaz, Jonny Otto, Pablo Ibáñez, Raúl Fernández y Jon Pacheco. El club deja así perfilada su plantilla, a la espera de la probable incorporación de un central en este epílogo que complemente a Facundo Garcés y al defensa navarro recién aterrizado como cedido desde la Real Sociedad.

Con la llegada de Suárez se reducen las probabilidades de que desembarque en Vitoria Juan Cruz, por el que el Leganés todavía se resiste a rebajar de forma drástica la cláusula de rescisión de 10 millones de euros. Eso sí, la plantilla de Coudet continúa con un solo extremo izquierdo puro, donde tendría hueco el atacante hispano-argentino. En las primeras dos jornadas ha sido Abde el que ha ejercido ese rol de agitador por la banda zurda de forma destacada, aunque su continuidad en Mendizorroza no está todavía definida.

En el caso de Denis Suárez, su perfil se asemeja al de Aleñá, el de un centrocampista de formación que se ha acomodado con acierto al costado izquierdo. En este sentido, el catalán, recién llegado del Getafe, y el gallego pueden jugar tanto en la banda zurda como en la mediapunta, donde de momento Jon Guridi ha actuado como titular habitual.

En su última campaña en el Villarreal, Suárez disputó 690 minutos repartidos en 22 partidos entre Liga y Copa. Pese a que se tratan de cifras discretas, sobre todo en la cuota de protagonismo en cada encuentro, son superiores a las de su campaña anterior, en la que sólo jugó cinco duelos tras sufrir varias lesiones. En Vitoria buscará reencontrarse con su mejor fútbol. Ése al que dio forma con el Chacho en Balaídos.