El Alavés quiere «soñar» en el Bernabéu

Porque el coliseo blanco permanece inexpugnable desde que lo profanara el Villarreal (2-3) el 8 de abril de 2023, hace casi año y medio. Desde entonces los de Carlo Ancelotti han disputado 37 partidos ante su público entre Liga y Champions, con un balance de treinta victorias y siete empates. «Ves los números y es verdad que asustan», reflexiona Luis García Plaza, que también tiene su particular historia de desamor con el Santiago Bernabéu, donde no ha puntuado en sus siete visitas como entrenador (con Levante, Getafe, Mallorca y Alavés), con un bagaje de 33 goles en contra y solo cuatro a favor.

La última vez fue en mayo, cuando, con el equipo salvado y en buena dinámica, el Alavés se llevó cinco tantos. «Es difícil», asume el técnico albiazul, «pero lo que no quiero es que pase lo del año pasado, que no competimos, no fuimos nosotros». Es su obsesión. «Tenemos que competir y terminar satisfechos con nosotros mismos», recalca, consciente de que incluso la mejor versión de su equipo tiene complicado tener opciones ante un rival «de un nivel superlativo» como el Real Madrid.

El técnico albiazul quiere que los suyos salgan «a disfrutar de un partido así y terminar con la sensación de haberlo dado todo», Y, por qué no, «a soñar» con ser el equipo que rompa esas magníficas rachas del conjunto blanco. «Estos partidos los tienes que afrontar desde el realismo, saber que la empresa es difícil. Y después desde la ilusión de hacer algo bonito. Y no frustrarte porque te dominen o se pongan por delante. No perder nunca el foco. Reto difícil, sí, pero en el fútbol imposible no hay nada».

En resumen, «no es tanto el resultado sino competir para tener opciones». Enfrente están «los mejores del mundo», admite Luis García, que en este punto manda un mensaje para los rectores que dirigen el fútbol mundial. «Es lo que están buscando, que haya estas diferencias entre unos equipos y otros». Amenazan al conjunto babazorro Mbappé, Vinicius, Bellingham, Rodrygo, Valverde... «No te puedes preocupar de uno solo porque te preocuparías de todos», apunta el entrenador alavesista.

Prefiere no personalizar entre la pléyade de estrellas ofensivas que maneja Carlo Ancelotti, pero no puede evitar poner la lupa en la portería. Y lo hace con un ejemplo: «Luego hay otro problema. Porque el Stuttgart les pasó por encima en los primeros 25 minutos, pero tienen un tío que tiene cinco manos», subraya en alusión a Thibaut Courtois, la última barrera del Real Madrid. Incluso en el mejor de los casos, que las cosas salgan a la perfección, aún habría que superar al guardameta belga. «Es el mejor portero del mundo con mucha diferencia sobre los demás. Es un nivel superlativo. Hace dos Champions la gana él», destaca.

El Alavés va a hacer «muchos cambios» en el Bernabéu. Pero Luis García quiere dejar claro que lo haría ante cualquier rival que le habría tocado en suerte en el calendario, «me da igual que sea el Madrid, el Barcelona o el Mallorca». Ya lo hizo en la anterior jornada intersemanal, en Anoeta, y salió bien (1-2). «Hay que rotar», asume. «Porque en este principio de temporada hay que utilizar a la mayoría de la plantilla para que después estén con chispa». Si Ancelotti anunció que dará la alternativa a Endrick y que Bellingham va a jugar, ya sea de inicio o después, en el Alavés les llega el turno a jugadores con poco protagonismo como Luka, Villalibre, Benavídez o Diarra.