La residencia Arabarren de Lakua, obligada a pagar 28.615 euros en IBI

Ambos conceptos son recaudados por la Hacienda municipal, que rechaza las alegaciones de Arabarren porque «tener la consideración de cooperativa de iniciativa social no conlleva automáticamente la exención en los tributos locales, ya que los requisitos establecidos en las normativas respectivas difieren en lo que se considera carecer de ánimo de lucro». Y más cuando se retribuye a sus socios -entre los que se incluye a los trabajadores- por sus aportaciones en vez de «destinar a la realización de sus fines todos los resultados positivos obtenidos». La presidenta de la cooperativa aludía a que en lo que se refiere al IVA, que en este caso recauda la Hacienda foral, sí que están exentos por normativa.

«¿Por qué motivo la Diputación no calificó como cooperativa sin ánimo de lucro a todos los efectos a Arabarren? ¿Quién decidió otorgar esta calificación exclusivamente a efectos del IVA? ¿Tienen intención de ampliar esta calificación para todos los efectos fiscales?», cuestiona EH Bildu en una pregunta en las Juntas a la titular de Hacienda, Itziar Gonzalo.