«Estamos viviendo el mejor momento del metal»

Pacho Flores tiene más trompetas que años. El músico venezolano, nacido en 1981, es fruto del Sistema de Orquestas y lleva esa bandera por todo el mundo. No solo se ha convertido en una de las grandes figuras internacionales del instrumento; también está contribuyendo a la evolución del mismo, mediante nuevos diseños realizados especialmente para él. En su disco 'Fractales', que acaba de aparecer, utiliza nueve trompetas distintas para tocar obras que van de Haydn a Lindberg.

- ¿Por qué el título? Un fractal es una figura geométrica que se multiplica.

- Cuando pienso en un disco me centro en el hilo conductor, pero no en el título. En este caso, me ayudó mi constructor de instrumentos. En la naturaleza hay fractales y en música hay muchos ejemplos. Bach hace motivos de escalas que multiplica y las hace infinitas. En un concepto moderno tiene más que ver con la música aleatoria. Este disco es un collage que va del concierto más importante, el de Haydn, a una obra del romanticismo (Sarasate) y así hasta el siglo XXI con Lindberg.

- Además de tener muchas trompetas, también participa en su diseño.

- He perdido la cuenta de las que tengo. Serán al menos 40 en uso diario. Estoy tratando de evolucionar el instrumento en lo técnico y en lo interpretativo. En el concierto de Haydn uso, por primera vez, una trompeta en cada movimiento. El oyente que escucha el disco no lo sabe pero sí percibe algo. Usar muchos instrumentos en cada disco es como una firma para mí.

- El concierto de Haydn es el eje del disco pero los descubrimientos están en el resto de las obras.

- Es así, y por eso hemos dado una vuelta de tuerca a Haydn. El Sarasate es una pieza complicada para el violín y su adaptación a la trompeta me ha costado muchísimo. Ahí uso dos distintas. Luego hay un clásico del siglo XX, Arutunian, que se parece mucho a Khachaturian. En el movimiento lento uso un fliscorno para darle una mayor dulzura. Y además he hecho otra cadencia distinta a la que se toca desde hace cincuenta años. Luego está el concierto de Lindberg, muy reciente, que es una belleza, con sus melodías orientales.

Explorar y evolucionar

- ¿Por qué combinar obras escritas para trompeta con otras escritas para otros instrumentos y arregladas? ¿Es por escasez del repertorio?

- Sí es un poco escaso. Tras la época de oro del barroco y hasta Haydn, hubo un bajón importante. El repertorio empieza a crecer a finales del XIX, aumenta en el XX y hoy en día estamos viviendo el mejor momento del metal. Tenemos herramientas que nos ayudan en esa evolución y los trompetistas queremos evolucionar y explorar y en ese sentido 'robamos' piezas de otros instrumentos.

- El disco tiene una combinación curiosa: un solista del Caribe tocando con un director escandinavo y una orquesta que se llama Ártica.

- Sí, lo es. Soy un caribeño de raíces españolas que llegaba a paisajes helados y me encontraba con que la gente no es así: me han recibido de manera muy cálida. Y a mí me ha enamorado siempre la gran flexibilidad de las orquestas escandinavas.

- Tiene que ser especial ser dirigido por alguien como Lindberg que a su vez es solista de viento metal. ¿Qué supone para usted?

- Te sientes bien con una persona que conoce su oficio y su instrumento, que es la orquesta. Lindberg es el referente máximo del trombón pero además es un gran compositor y director. En el 85% de sus conciertos toca el trombón, dirige una obra suya y luego una sinfonía de otro. Es un músico supercompleto que conoce perfectamente el metal y sabe cuándo apretar y aflojar la cuerda. Para mí ha sido un gran aprendizaje.

- ¿La crisis venezolana y la muerte de Abreu pueden afectar al Sistema?

- Por fortuna, el Sistema ya tiene 45 años y está en la sangre de los venezolanos. Un millón de niños del país están hoy en el Sistema. Si suma a sus familias estamos hablando de muchos millones que apoyan el proyecto. No soy político y no sé cómo hacer para resolver la crisis de Venezuela a todos los niveles, pero sé que me corresponde tratar de que el Sistema siga. Estoy buscando fechas para ir a Venezuela, conocer a la nueva generación y poder tocar con ellos.

- Ha hecho disco por año. ¿Qué proyecto tiene ya en marcha para 2019?

- El de 2019 ya está grabado. Estamos buscando la fecha de lanzamiento. Tiene unas cuantas sorpresas: mi propio concierto de trompeta por ejemplo. Luego, en colaboración con orquestas de todo el mundo hemos encargado obras a varios compositores. Uno de ellos es Arturo Márquez, cuya obra estará en Oviedo en breve. Quiero llevar el instrumento al límite.