La gasolinera más barata de Euskadi llena en Amorebieta

Los conductores que circulan entre Amorebieta y Erletxe se deslumbran con unos números rojos. En este caso no es sólo por el llamativo brillo del cartel publicitario, sino también por los precios impactantes que anuncian: 1,22 euros el litro de gasóleo, y 1,30 el de gasolina. La estación de servicio ubicada en el kilómetro 96,7 de la N-634, que se reabrió el 17 de marzo bajo la firma Easygas, vende el combustible más barato de Euskadi. En concreto, diez céntimos menos. La clave del negocio es sencilla: «Vender muchos litros, pero ganando menos», argumenta Joseba Barrenengoa, uno de los propietarios. «Nos ha desbordado la impresionante afluencia de clientes», admite. Esta circunstancia les llevará a ampliar la plantilla de ocho operarios, todos ellos discapacitados, a una docena.

En pocos minutos, ayer por la mañana se formó una hilera de siete coches que esperaban turno. «Venimos de Amorebieta y al ver el cartel nos hemos quedado con que era muy barata», comentaban Iñigo y su compañero, mientras aguardaban a ser atendidos en el coche de la empresa de limpiezas en la que trabajan. «Esta es la primera vez que venimos, pero seguro que volveremos», añadían. El caso de Pedro Souto es similar. Su hermano le indicó que «estaba muy bien de precio» y es la segunda vez que reposta allí. «Me ahorro ocho euros, lo que supone unos seis litros de diferencia, y al final se nota en el kilometraje», matizaba el carpintero.

El transportista Eduardo Fernández, que trabaja en Zamudio, pasa varias veces por semana: «Me puedo ahorrar entre 8 y 10 euros cada vez, y a nada que eche dos o tres veces a la semana, al final es dinero». Su situación de autónomo le hace «más que necesario estar pendiente de los precios».

Probeta para clientes

El coste es, precisamente, el factor que ha llevado a la gasolinera, situada en el entorno de Kortederra, a despachar entre 15.000 y 20.000 litros al día. «El combustible se compra en el mismo lugar donde lo hacen el resto de empresas grandes, en el Puerto de Bilbao», apuntaba Barrenengoa para despachar los rumores sobre «la venta de un producto de dudosa procedencia».

Para garantizar la calidad del género que suministran, tienen a disposición de los clientes los albaranes, «en los que figura que el gasóleo que compramos es el que tiene aditivos; el que las demás empresas venden con un nombre especial y más caro, nosotros lo sacamos como normal y a diez céntimos más barato. Por lo tanto, es mejor producto». En este sentido, insistía en que «lo único que hacemos es reducir nuestro margen de beneficios, que para el resto es de 15 céntimos por litro, mientras nosotros sólo ganamos 5».

Barrenengoa se enorgullece también de ser «una de las pocas estaciones, si no la única, en tener a disposición del cliente una probeta donde se puede comprobar la exactitud entre los litros que se pagan y los que se dispensan». La apertura de Easygas es pionera en la comunidad, pero acumula ya diez años de experiencia en la localidad leonesa de Manzanal del Puerto. Ahora, la empresa tiene como objetivo expandirse en Euskadi, y ya han planificado tres nuevas estaciones en Bizkaia, que se ubicarán en Zamudio, Mungia y Sestao.