Simeone oye insultos... solo en ocasiones

La memoria rojiblanca no perdona ciertas cosas, por eso, desde que Simeone le clavó los tacos a Julen Guerrero hace 18 años con una actitud muy poco deportiva, el argentino no cuenta con las simpatías de los aficionados del Athletic. Y su visita el miércoles al nuevo San Mamés no ha servido para cerrar heridas. Más bien al contrario. Durante la rueda de prensa posterior al partido, donde, por cierto, calentó a la hinchada bilbaína pidiendo aplausos (de forma exagerada) para Diego Costa -autor del gol colchonero- cuando fue sustituido, entre otros gestos, manifestó que "ante todo", siente un "gran respeto por el Athletic y su estadio".

Hasta ahí, todo correcto. Lo malo es cuando a sus halagos le añadió la coletilla de "más allá de insultos". Ciertamente, algunos aficionados le dedicaron exabruptos. Y, casi a punto de finalizar su comparecencia, acabó de redondear su actuación cuando un periodista local le preguntó si sólo oía los insultos en San Mamés o si también percibía los que se dedicaban en el Calderón a jugadores como Gurpegui. "No los escuché", manifestó. Una respuesta que alimenta, un poco más, su historia de 'amor' con el Athletic.