Renacimiento Histórico plantea adecentar seis solares como zona de ocio y esparcimiento

La propuesta diseñada dentro de la Asociación Renacimiento del Centro Histórico, que se la trasladará al Ayuntamiento, una vez se haya conformado el sábado la nueva Corporación, ha puesto el foco en seis solares y en la 'reapertura' del callejón de los pescadores. Una vía ahora tapiada que une la calle Los Hornos con la ribera del Ebro y que debe su nombre a que tradicionalmente era el lugar de paso de los pescadores hacia el río.

Lugar en el que mucho tiempo atrás estuvo ubicada una de las puertas de acceso a la ciudad por la muralla que da al río, pero cuyo peso histórico pasa más que desapercibido hoy en día para la gran mayoría de los mirandeses. De ahí que, además de pavimentar y sustituir la tapia de acceso por una valla que permita la visualización desde ambos extremos, desde la asociación se plantee la colocación de una placa con un código QR que cualquiera pueda escanear para conocer algo más de la historia de ese entorno que también se quiere acondicionar y adornar con redes y algún otro elemento que recuerde su pasado pesquero.

«Durante siglos la gente sacaba del Ebro el pescado que luego vendía en la ciudad; y, para ello, accedían al río por ese callejón que, aunque parezca mentira, se cerró hace no tanto para evitar suciedad», explicó Chechu González, integrantes del colectivo; que también dejó claro que, mientras no exista una mayor concienciación sobre el cuidado de lo común, seguiría sin abrirse para el paso.

Sí se confía en que se puedan usar las seis plazoletas temáticas que van a plantear hacer en solares vacíos a los que quieren dotar de vida en el corto plazo con pequeñas adecuaciones, mientras no exista ningún proyecto de construcción. Uno de ellos, es el que se encuentra en la calle La Cruz frente al Apolo, y para el que han pensado conformar un punto de lectura, con mesas, sillas y unas jardineras.

Cerca de ahí, en la confluencia de esa vía con Las Escuelas y la Travesía de Frías, se propone destinar un amplio solar a zona de juegos para niños, decorando las paredes de dos edificios con grafitis de payasos, clowns y otras figuras tradicionales; además de colocar neumáticos de coches pintados a modo de atracciones.

A esa misma altura pero en la calle San Juan, junto al bar el Esperpento, se ha diseñado un 'rincón del ciclista', en el que pintar diferentes diseños de ese vehículo de dos ruedas en varias fachadas de un espacio que creen que se podría utilizar como terraza hostelera.

Un uso similar al que se le podría dar al solar dejado por la demolición del numero 4 de la calle San Juan, cuyo derribo se completó a principios de 2021 y en el que plantean, además de colocar mobiliario urbano y algo de vegetación crear con un trampantojo una gran grieta en el suelo, similar a las que generan los terremotos. El mismo fenómeno que en clave de rehabilitación esperan que viva Aquende en los próximos años.

La misma idea, dibujando un gran cráter, proponen para otra parcela sin uso situada en la Travesía de la Fuente, que sólo habría que limpiar y decorar. Algo más de trabajo requeriría un solar situado en Real Aquende, junto al número 47, en la parte trasera del edificio de Santa María, y que se ve a la izquierda nada más girar desde la plaza de España en dirección a El Crucero.

Ahí, además de limpiar, sería necesario nivelar el suelo, colocar un vallado de delimitación respecto al bloque de viviendas y colocar mobiliario urbano y árboles; siempre y cuando se opte por avalar su propuesta que, dejaron claro no es definitiva ni está cerrada. Y, por tanto, estará abierta a aquellas propuestas de mejora que les puedan llegar.

De manera paralela, la asociación trabaja en dar forma a los proyectos de rehabilitación energética. Aunque varios ya los tenían listos para poder presentarlos antes del 30 de junio, al haberse alargado el plazo hasta final de año, han decidido darlos un repaso y hacerlos aún más detallados, con cálculos económicos más analizados para cada una de las 41 viviendas que, de momento, ya van a solicitar la ayuda para la realización del libro del edificio; y, a partir de ahí, presentar el proyecto de mejora y saber qué porcentaje de ayuda les confirman que recibirán si deciden ejecutar la obra.

Antes de que acabe el mes confían en presentar en la Junta la documentación de cuatro de los siete edificios con los que están trabajando y que ya se pueden identificar porque en todos ellos aparece colgada en su fachada un cartel con el logo de la asociación. Se trata de que la ciudadanía en general vea que se avanza con los proyectos y que la recuperación del Centro Histórico no es sólo una idea, sino que puede ser una realidad tangible en un plazo no demasiado largo. Aunque aún hay edificios en los que no se animan a dar el paso, ya sea porque no se ponen de acuerdo los vecinos, son mayores y les cuesta dar el paso o son viviendas sin uso.