La militancia de IU- Podemos es «escéptica» con el pacto de gobierno

Los afiliados y simpatizantes de IU- Podemos tienen claro que el resultado de las urnas les ha otorgado cierta influencia en las decisiones políticas de la ciudad, y quieren hacer valer ese peso, ya sea dentro del equipo de gobierno o en la oposición. El sentir mayoritario es que ha llegado el momento de dar un paso al frente, pero no a cualquier precio.

La conclusión que se extrae de la asamblea celebrada el martes, a la que asistieron más de medio centenar de personas, es que si se opta por el acuerdo con el PSOE hay que marcar algunas líneas rojas y asumir concejalías de envergadura, ya que los afiliados consideran que la coalición ha obtenido un número significativo de ediles y su papel no puede ser el de mera comparsa.

También existe cierto recelo respecto a la estabilidad del pacto. Durante las dos últimas legislaturas, IU y Podemos han hecho una oposición muy crítica, y la relación con el PSOE ha quedado muy tocada. Aunque durante las dos semanas que ambas partes llevan negociando han servido para limar asperezas, y el tono ha sido cordial, hay quienes dudan de que esa sintonía pueda mantenerse durante todo el mandato si no quedan claros algunos puntos de la hoja de ruta que a la larga pueden dar lugar a discrepancias.

Por este motivo, en los próximos tres días se intensificarán los contactos entre socialistas y la coalición, con el objetivo de llegar a un pacto, ya que es el escenario que ambas partes consideran idóneo para la gobernabilidad de la ciudad. Pero el tiempo apremia. Todo apunta a que la negociación seguirá abierta hasta última hora, sin olvidar que el sábado es la fecha marcada para la toma de posesión de la nueva corporación municipal.

Si finalmente no se llegara a un acuerdo, Aitana Hernando tendría que gobernar en minoría y alcanzar pactos puntuales con el resto de formaciones durante la legislatura. No es un escenario desconocido para la actual alcaldesa, ya que en su anterior mandato fue capaz de aprobar presupuestos con el apoyo de Partido Popular, Miranda Puede y Ganemos a cambio de aceptar diferentes propuestas de dichos partidos en cada año. En la legislatura que finaliza ahora, el PSOE ha gobernado con mayoría absoluta al disponer de once concejales, lo que le ha permitido sacar adelante sus propuestas sin necesitar el respaldo de ninguna formación.