El símbolo de una generación tras otra
Homenaje. ·
Gorka Ortiz de Urbina, la cuarta encarnación del aldeano más famoso de Zalduondo, apartará tras esta Blanca su uniforme de Celedón
Han pasado veintidós años desde que Gorka Ortiz de Urbina se presentara en este periódico como «un chico normal, de calle, que aspira a tener una vida tranquila». El vértigo de ese nuevo símbolo de las fiestas de Vitoria no era hacer de Celedón veinte veces (como hizo tradición su predecesor Iñaki Landa)ni cruzar el paseíllo entre 40.000 personas si no pagar su casa «cada mes durante veinticinco años». En 2001 tenía 29 años y medía 1.90 metros de altura. De allá para acá –medidas aparte–, el aldeano de carne y hueso más famoso de Zalduondo se ha convertido en el símbolo de una generación tras otra. Tras esta Blanca, el símbolo de la fiesta apartará su uniforme y pasará a ser «un blusa más» de la cuadrilla Bereziak.
La polvareda que deja tras su marcha por un polémico relevo está aún por disiparse, pero esta tarde se apartará para dar la bienvenida al tiempo festivo. Los vitorianos recibirán en la Virgen Blanca a la cuarta encarnación de Celedón con un alborozo en el que ya no hay ni botellas de cava ni humo de puros, pero sí tirones, abrazos y cientos de palmadas mientras busca lograr un paseíllo hasta la Balconada de San Miguel en tiempo récord. En el cronómetro, de la primera cruzada hasta la última se ha registrado una diferencia de 5 minutos y 39 segundos.
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EL CORREO ha explorado dos décadas de hemeroteca para ensalzar su reinado. En veintidós años ha engendrado a un 'alter ego' en forma de muñeco para sustituirle en sus escenas de jolgorio más peligrosas, ha cambiado su escolta de policías locales a blusas, ha vivido una reforma de su casa, además de un aislamiento en ella. «Me imagino que todo se irá apagando, pero siempre vamos a ser dos en uno», resumió en una entrevista reciente con este periódico.
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El año «más emotivo». Se cumple el 50 aniversario de Celedón, que se celebra con Iñaki Landa y Gorka Ortiz de Urbina como protagonistas. Los blusas les acompañan por primera vez en el Chupinazo. José Luis Isasi, el primer Celedón humano, permanece ausente por problemas de salud. Además, Ortiz de Urbina se hace padre por primera vez.
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El 4 de agosto es desde hace años una fecha totalmente planificada para el aldeano más famoso de Zalduondo. Ruta de poteo, saludos y el recibimiento del puro en el bar Bujanda, que cerró en julio de 2022 después de 92 años. Esta Blanca lo fumará frente a Fueros.
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Con catorce 'ascensiones' y «los pies en el suelo como el primer día». Celedón alcanza la balconada de San Miguel en 4 minutos y 21 segundos acompañado de 83 miembros de 13 cuadrillas. Completa un recorrido de 118 metros a través de decenas de miles de personas.
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Celedón se queda en casa. Por primera vez en 19 años es Gorka a secas. No hay festejos ni esa atmósfera de alegría pegajosa. El paisaje, la Virgen Blanca, es el mismo de siempre pero le falta el paisanaje. Al año siguiente, en 2021, se repite la misma escena.
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La Blanca más esperada después de tres años de ayuno festivo. Ortiz de Urbina aseguró antes de arrancar los festejos que «he aplicado la máxima de más zapatilla y menos comida y voy con mis perros Bihotz y Bimba a diario una hora con ellos».
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