El mapa del vino de la Familia Martínez Bujanda

Dicen que este será un verano atípico, que nos quedaremos más cerca y que buscaremos y redescubriremos los pueblos, los propios y los ajenos. También se puede innovar, y buscarle un hilo conductor a las vacaciones más allá del descanso y la tranquilidad de disponer del tiempo como mejor le parezca a cada cual. ¿Y si, sin pasarse de kilómetros y sin ir saltando fronteras como si nada, el radio de acción se amplía? ¿Y si el viaje se vuelve temático? ¿Y si la columna vertebral de todo fuera, por ejemplo, el mundo del vino? Será por posibilidades... En unas horitas se puede pasar de una denominación a otra y con ello cambiar por completo de escenario.

Las fincas de la Familia Martínez Bujanda, toda una institución en Rioja por sus más de 130 años ya dedicada a la elaboración de esta bebida –desde aquel 1889 en el que José Martínez Bujanda fundara la primera bodega de la saga en la localidad alavesa de Oyón–, permiten darle más contenido a esa palabrita tan oída, la del enoturismo. Turismo del vino en toda la diversidad viajando por el paisaje, el paisanaje, la cultura de cada lugar y sus frutos, eso es lo que se puede hacer yendo de una finca a otra.

La más cercana es Finca Valpiedra, en el corazón de La Rioja y remojada por el Ebro. La vista es bien bonita: es lo que tiene que el terreno se encuentre en uno de los meandros del río, entre las localidades de Fuenmayor y Cenicero. Las 80 hectáreas de Finca Valpiedra juegan con la tierra como les exige la orografía y van descendiendo, en tres terrazas, hasta el agua. Las sierras de Cantabria y la Demanda ayudan a completar la postal. Eso en cuanto a lo que se aprecia a simple vista, porque como la cosa va de saber algo más, la visita a esta bodega lleva a conocer la filosofía diferenciada de trabajo, a entender qué significa eso de ser una de las dos de la D.O.Ca. Rioja que forma parte de la asociación Grandes Pagos de España. Resumiendo, que aquí se apuesta por el terruño, por la elaboración de vinos con uvas procedentes del propio viñedo. Lo que se ve se refleja en la copa. Y para catarlo, se puede reservar ya la experiencia sencilla de vino de bienvenida, visita de viñedo y bodega y cata de dos vinos (15 euros) o un recorrido en 4X4 con picnic con vistas (30). Hay que llamar a los números 941 450 876 o 628 046 505 para reservar.

La siguiente parada de las vacaciones podría ser Finca Antigua, en Los Hinojosos, Cuenca. El plus: estar en plena ruta del Quijote, con toda su historia, los molinos de viento, los interminables campos de labranza, la leyenda. Vamos, cultura sobre cultura. Pero como aquí el protagonista es el vino, hay que decir que estos se elaboran teniendo muy presente el respeto por el medio ambiente. Finca Antigua es un ejemplo de adaptación al paisaje, con una edificación funcional de acero, piedra y cemento que se integra en el entorno de viña, monte bajo y encinas y carrascas. En La Casona, con el típico patio manchego, se realizan catas de grupo. Para conocerla, y saber todo sobre la biodiversidad de estos viñedos que se distribuyen por mil hectáreas de terreno a 900 metros de altitud, hay diseñadas rutas a pie o en 4×4. En la modalidad Lagarto Ocelado (10 euros por persona) se incluye foto para el recuerdo, parada en el mirador con vistas a los viñedos y posterior visita a bodega y viñedo, cata comentada de 3 vinos en espacio abierto y una tapa de queso manchego para maridar. Las reservas se hacen llamando al 608 583 776.

En Finca Montepedroso, en la localidad vallisoletana de Rueda, se habla ya de blancos de altura, unos bastante conocidos por aquí, por cierto. Las menos de 30 hectáreas de viñedo están situadas a 750 metros de altitud y en ellas se encuentran los tres tipos de suelo característico de la denominación (de cantos de piedra, el arcilloso en barranco y uno con gran cantidad de sedimentos de limo y arcilla) pero una sola de uva, verdejo. Hay una visita por diez euros, y otra por el doble que da la oportunidad de hacer una cata vertical, es decir, de tres añadas históricas de la bodega. Sin olvidarse nunca de la tapa de embutido de la zona. Las reservas, en el 983 868 977. O vía web (www.familiamartinezbujanda.com), en cualquiera de las tres fincas.