Altuna y Mariezkurrena, en el último suspiro

La cara de Altuna III nada más meter el último gancho en el frontón Javier Adarraga de Logroño lo decía todo. El delantero de Amezketa suspiró y agradeció el trabajo a Mariezkurrena II. Habían ganado por la mínima un partido demasiado espeso para ellos en el que optaron por resistir y la suerte cayó de su lado. Siguen con vida en el Parejas después de sumar su primer triunfo en la liguilla de semifinales. En el otro lado de la balanza estuvo Ezkurdia. Poco más pudo hacer el de Arbizu para tratar de ganar el partido. Jugó al límite, arriesgó, quitó las pelotas complicadas que pudo a su zaguero y se fue a casa con una docena de tantos, pero un mal día de Ladis Galarza echó por tierra todo su trabajo. El de Baraibar perdió diez pelotas, y con semejante número de regalos es prácticamente imposible llegar a 22.

Se quedaron a uno en un duelo con mucha tensión en el que tan solo el delantero colorado consiguió mostrar el verdadero nivel que atesora. Al resto les pudo la responsabilidad. Es cierto que Mariezkurrena estuvo más comedido que en el anterior encuentro y en lugar de arriesgar todos los pelotazos consiguió templar el nervio y le soltó cuando tuvo solo pelota clara. Fue una baza que explotaron a la perfección los azules, porque Altuna III estuvo bastante por debajo de su versión más inspirada. Sin embargo, las tablas que tiene le permitieron no desconcentrarse y seguir en la pelea. Asumió que no era su día, pero no perdió pelota. Le costó abrir ángulos y tampoco vio huecos en el 'txoko', pero supo adaptarse.

Había mucho en juego y se notó desde los primeros compases. Primero había que sujetar el choque, por lo que un buen arranque iba a ser fundamental. Con pelotas más tranquilas que daban más tiempo para colocarse comenzó la batalla. El marcador marchó ajustado hasta el cuarto tanto, pero bastó para ver la táctica de una y otra combinación. Ezkurdia puso el ritmo a la contienda y los demás aguantaron como pudieron. Porque las fases en las que Ladis Galarza estuvo medianamente centrado llegaron a contar hasta con cuatro tantos de ventaja (8-4), pero su inconsistencia hizo que sus rivales no se desengancharan. Hicieron la goma después de algún momento de brillantez y en el ecuador del choque se situaron a uno (11-10). En la segunda mitad el encuentro mantuvo los mismos síntomas.

Los navarros fueron siempre por delante hasta casi el final, pero su ventaja no superó los tres tantos. No pudieron romper el choque. Ezkurdia caminó sobre el alambre y aveces tropezó, y atrás la inseguridad fue la nota dominante. Los azules siguieron a lo suyo. Se agarraron con todas sus fuerzas a la esperanza. Y les salió bien.

Hoy (17.15 horas) se juega el segundo encuentro en el Bizkaia. Elezkano II y Zabaleta se miden a Peña II y Albisu. Si ganan el vizcaíno y el de Etxarren estarán en la final. Si vencen los guipuzcoanos todo se decidirá el próximo fin de semana.