El Barakaldo despeja cualquier duda en El Toralín

La marcha de Maroan Sannadi y la posterior derrota ante el Real Unión habían suscitado ciertas dudas en torno a un Barakaldo que estaba realizando un papel sobresaliente en su primera experiencia en Primera Federación. Sin embargo, los gualdinegros despejaron todas esas dudas de un plumazo, con un valioso triunfo en uno de los escenarios más exigentes de la categoría. Los fabriles fueron de menos a más en El Toralín y consiguieron vencer a la Ponferradina (0-1), segundo clasificado. Todo un golpe sobre la mesa para asentarse aún más en los puestos de play-off de ascenso.

El inicio fue realmente descorazonador. Los primeros diez minutos del encuentro fueron un auténtico asedio de los locales, que gozaron de hasta cuatro saques de esquina en ese breve periodo. La superioridad de los de El Bierzo fue muy patente, disponiendo éstos de hasta tres ocasiones para estrenar el marcador. La primera de ellas en un disparo lejano de Mula, la siguiente en un intento de gol olímpico de Yeray Cabanzón, ambas repelidas por un atento Unai Pérez. La última de ellas fue la más clara. Mula realizó un centro con el exterior que remató de cabeza a la media vuelta Bustos, estrellando el esférico en el travesaño.

El Barakaldo sufría mucho, pero logró una vía de escape por su costado derecho, mediante las incursiones y pases filtrados de Luis Bilbao, que dotaban a los fabriles de una profundidad necesaria para salir de su propio campo. Pasado el primer cuarto de hora de choque, se igualaron más las tornas. La Ponferradina seguía dominando la posesión, pero sin generar peligro, y los de Imanol de la Sota cada vez se acercaban con más frecuencia al área contraria. En mitad de este tramo de impás, en el minuto 38, en una nueva acción conducida por Luis Bilbao, Pablo Santiago aprovechó un control erróneo de Revilla para disparar potente, raso y cruzado con el rifle que tiene por pierna derecha, y sorprender así a Andrés Prieto.

Así, el Barakaldo conseguía lo más complicado: ponerse por delante. Lo hacía un Pablo Santiago que ha participado en quince goles en esta Primera Federación: siete tantos y ocho asistencias. Lejos de acomodarse, el segundo tiempo fue mucho más vivo, convirtiéndose, en ocasiones, en un correcalles, sin dueño y con constantes llegadas a ambas áreas. En este sentido, los baracaldeses parecieron sentirse más cómodos y mostraron una mejor versión que en la primera mitad. Tuvieron una actuación coral más que notable, que les valió para saber defenderse, tutear y, en algunos instantes, superar a uno de los equipos de más entidad de este grupo 1 de Primera Federación.

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