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PANKRA NIETO
Amorebieta - Sporting | Segunda División Jornada 8

El Amorebieta suma un punto que sabe a poco ante el Sporting

Los azules dejan escapar la victoria ante el líder en un gran partido de los de Iñigo Vélez de Mendizabal

FERNANDO ROMERO

Sábado, 2 de octubre 2021

Nadar para morir en la orilla. El Amorebieta acarició el triunfo ante el Sporting, el líder de Segunda División, durante más de ochenta minutos. Una gran puesta en escena de los zornotzarras, que maniataron a los asturianos, un magnifico gol de Gorka Larruzea y, como siempre, entrega hasta el final. Todos los méritos fueron locales, pero eso no fue suficiente para lograr la segunda victoria del curso. Villalba, en los minutos finales, se cargó de un plumazo las ilusiones de los azules, que se tienen que conformar con volver a sumar un punto cuando fueron merecedores de mayor premio.

SD Amorebieta

Santamaría; Larrazabal, Markel, Arregi, Irazabal, Ozkoidi; Peña (Olaetxea, 46'), Larruzea, Bilbao (San José, 66'); Obieta (Orozko, 66') y Guruzeta (Etxaburu, 83')

1

-

1

Sporting

Mariño; Bogdan, Babin, Berrocal, Kravets; Gragera (Nacho, 69'), Pedro Díaz; Villalba, Campuzano (Aitor, 65'), Gaspar (Rodríguez, 69'); Djurdjevic.

  • GOLES 1-0, m. 18: Larruzea; 1-1, m. 82: Villalba.

  • ÁRBITRO Moreno Aragón (comité madrileño). Amonestó a Álvaro Peña, Larruzea por los locales, y a Djurdjevic, Fran Villalba, Aitor y Kravets por los visitantes

  • INCIDENCIAS Lezama, 1.178 espectadores.

Iñigo Vélez parece tener ya definido un once tipo, y lo va retocando lo justo. Ante el Sporting, el técnico vitoriano presentó solo tres variaciones. La obligada por la sanción a Luengo, cuyo lugar lo ocupó Jon Irazabal; y las entradas de Ozkoidi en el carril zurdo y Guruzeta como nuevo compañero de Obieta en la punta de ataque.

Un Amorebieta muy serio, y cada vez más jugón, todo hay que decirlo, se plantó con firmeza ante el cuadro rojiblanco. Los asturianos arrancaron con fuerza el partido, buscando inquietar mucha movilidad y la velocidad de sus hombres de ataque. El siempre inquietante Djuka tuvo un par de ocasiones en el arranque. La más clara en una contra a los 7 minutos en la que los de David Gallego se plantaron en ventaja numérica en la frontal. El disparo del internacional montenegrino se fue, afortunadamente, por encima del travesaño.

Superado el arreón inicial de los visitantes, que tampoco fue excesivo, los azules se fueron soltando. Partido tras partido, el Amorebieta es un equipo mucho más hecho, y eso se nota. Con un juego más pausado y ordenado, fueron acerándose a la portería defendida por el veterano Mariño. La primera oportunidad fue fruto de esa presión en bloque alto que tan bien hacen los de Urritxe. Álvaro Peña recuperó el cuero en zona de peligro y se lo filtró a Guruzeta. Su control, de espaldas a portería, no fue del todo bueno. Aunque pudo armar el disparo, el cancerbero le había tapado ya el espacio.

Los azules siguieron percutiendo, casi siempre por banda derecha. Un carril por el que Larrazabal, Peña y Guruzeta hicieron algunas diabluras. Fruto de una de esas conexiones, y aprovechando un pequeño barullo dentro del área, llegó una doble ocasión que atajó Marino tirando de reflejos. El rechace le cayó a Gorka Larruzea en la frontal. El gernikarra se sacó un tremendo zapatazo a bote pronto que se coló de forma irremediable en el marco asturiano.

Y lo que es mejor, tras el gol, el Amorebieta controló el partido a placer ante un Sporting desquiciado. Djuka, desasistido, no hizo más que protestar al asistente. Tras varios avisos, acabó viendo la amarilla. Fue de lo poco que el colegiado 'concedió' a favor de los azules. Cualquier disputa fue pitada a favor del Sporting. Ni siquiera eso sacó del partido a los de Iñigo Vélez, que siguieron a los suyo y que pudieron haber ampliado incluso su ventaja de haber tenido más tino.

Solo en los instantes finales pudo inquietar el Sporting de verdad, y lo hizo a balón parado. Una falta ejecutada desde banda derecha la peinó Berrocal en punto de penalti, enviando el cuero cerca de la madera para poner fin a una buena primera mitad de los azules, que por primera vez lograron marcharse al vestuario con ventaja en Lezama.

El segundo tiempo del Amorebieta rozó la perfección. El juego discurrió por los cauces que más le interesaban a los zornotzarras, pertrechados a la perfección. A nivel defensivo, inmaculados. Sin cometer esos desajustes que semanas atrás les costaron puntos. No dudaron tampoco a la hora de buscar la portería rival, pero sin volverse locos. Si alguien mereció marcar, fue sin duda el conjunto vizcaíno, que pudo haber ampliado su renta en varias acciones muy claras. Obieta acarició su cuarta diana al filo de la hora de juego, pero su potente disparo desde la frontal lo despejó Mariño en una gran intervención. Casi a renglón seguido, fue Iker Bilbao el que pudo anotar de cabeza, pero un defensor rojiblanco se cruzó en su camino para interceptar su remate con el arquero ya batido.

San José, que entró en la segunda mitad, fue protagonista también de varios lances que pudieron haber tenido mejor destino. Tras un error en el despeje de Bogdan, el ex del Athletic recogió en la frontal pero, tras un control largo, disparó alto. Ya en los minutos finales, el navarro puso un magnífico balón a la espalda de la defensa para la carrera de Iñigo Orozko, que no supo definir en el mano a mano ante Mariño.

El Sporting, que no había tirado entre los tres palos en toda la segunda mitad, echó por tierra todo el trabajo de los azules a ocho minutos del final. Envío desde la derecha al que no llega Djuka en primer palo, pero en segundo apareció Villalba para fusilar.

El empate no agradaba a ninguno de los dos equipos, que siguieron buscando un tanto con el que quedarse los tres puntos. Un final frenético con una ocasión para cada bando. Santamaría, con una atajada monumental, mantuvo con vida a los suyos. Y Etxaburu, en la última del partido, disparó demasiado desviado.

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