Las gemelas alteran 'El Conquistador del Caribe': «Son unas impresentables»

Llevan solo dos capítulos y parece que haya pasado ya media aventura, a tenor de las despedidas. 'El Conquistador del Caribe' es una empresa dura y su decimonovena edición está empezando con muchas bajas. «Los trampolines han pasado factura», aseveraba Julian Ianzti. Y es que el salto de casi veinte metros del estreno lesionó a Maikol y Leire y, pese a sus ganas de continuar en el juego, no podrán regresar a sus respectivos equipos como aconsejaban los médicos. Así, azules y verdes arrancan cojos, y más el conjunto femenino que ya perdió a Itxaso en el primer duelo de la temporada. Eso sí, las ausencias duelen más en un equipo que en otro. A Maikol no lo van a echar mucho de menos los Corocote, sobre todo las gemelas, cuyos comentarios avanzaban que preferían no contar con un herido en sus filas.

Itu y Aitzi no dejan títere con cabeza cuando abren la boca. Las hermanas atacan verbalmente todo lo que se menea y hay componentes de su grupo que empiezan a hartarse de su verborrea. «Nos llaman las 'lastres', pues se van a cagar porque si nos pierden, van a perder a dos», amenazaba la pareja.

Tras elegir a un líder de cada equipo, comenzaba el juego de inmunidad. Los amarillos escogieron a Zuru; los rojos, a Giacchi; los azules, a las gemelas; y las Atabey, a Nerea. Y ésta última protagonizó la jornada, y no para bien. Para empezar, no se enteró del desarrollo de la prueba que consistía en llenar de agua los barriles del equipo contrario hasta desestabilizarlos y derribarlos. Las chicas no se aclararon y acabaron perdiendo el reto, seguidas de cerca por los Guaban, que sorprendentemente se convirtieron en el objetivo del resto de los grupos. Los beneficiados fueron los Corocote que lograron el segundo puesto, evitando así eliminaciones. Y los Yocahu volvieron a triunfar, haciéndose con el campamento rico.

Como ganadores, los colorados castigaron directamente a Nerea que se convirtió en la primera duelista. Helen fue la nominada por su grupo, mientras los amarillos se decantaban por Ilia, que ya había insinuado que le gustaría demostrar su valía en un duelo. Antes, los azules dieron la inmunidad a Álvaro. «Creemos que eres el más débil», argumentaron tirando de prejuicios. «Ya les callaré la boca», avanzó el andaluz que vive en Bilbao. «Igual tenéis que pensar un poco antes de hablar», aleccionó Lur Errekondo. «Es el discurso de siempre, aquí no hay ninguna novedad. En ese equipo hay por lo menos tres personas más débiles que yo», se defendía Álvaro señalando al trío que no se tiró del trampolín en la prueba anterior.

«Las gemelas son unas impresentables», opinan en el conjunto esmeralda que cataloga de «barriobajeras» a las hermanas navarras. La pareja no cae bien ni entre los suyos. Oxkar estaba de bajón y, en su agobio, apuntaba a las chicas azules. «No me gustan ciertas cosas que veo. El egoísmo. Esto no es un equipo. Hay tres personas que merecen la pena y el resto intenta ir sobreviviendo haciendo sus cábalas para seguir adelante», reflexionaba ante las cámaras. «No sé si quieres protagonismo o eres un puto falso de mierda», replicaban las gemelas.

El duelo era de auto ascensión. Las duelistas tenían que levantar su propio peso hasta llegar a alcanzar cuatro banderines. Ilia destacó consiguiendo dos señales y librándose de la quema. Helen y Nerea tuvieron que competir entre ellas y la primera logró vencer, condenando a su compañera tras un «duelo fraticida», como indicó Julian. Las Atabey están bajo mínimos.

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