La grácil vocalista Irati Bilbao inaugura el 47º Getxo Jazz

La joven vocalista duranguesa Irati Bilbao ha inaugurado esta tarde el 47º Festival Internacional de Jazz de Getxo, que en total ofrecerá 17 conciertos en dos escenarios: siete gratis y al aire libre en la Plaza de la Estación de Algorta (cinco a las 19 horas, y dos matinales a la 1 este fin de semana) y diez bajo techo y de abono en el auditorio Muxikebarri (a las 21 horas, con los grupos concursantes teloneando a los cinco cabezas de cartel: James Carter, Hiromi, Kurt Rosenwinkel & Mark Turner, Stacey Kent y Bill Frisell). Además, el viernes y el sábado habrá sendas jam sessions nocturnas en el Piper's de Algorta conducidas por el guitarrista Miguel Salvador.

En lo que a su agenda respecta, Irati Bilbao ha dado en el Getxo Jazz el primer concierto del fin de gira de su disco debut, 'Begin' (Errabal, 2020), un tour que tendrá cinco paradas: este miércoles 3 de julio en Getxo, este jueves 4 en Areatza (Ciclo Emakumea eta lurraldea), el viernes 5 en Ordizia (Goierriko Jazzaldia 2024), el viernes 2 de agosto en el Museo Cristobal Balenciaga de Getaria (en el ciclo Gau Irekia), y el viernes 9 de agosto en Plentzia (Agorrijazz 2024). Ya en otoño saldrá el segundo álbum de Irati: «Sobre el disco nuevo puedo adelantar que estamos trabajando en él desde hace meses y que lo grabaremos a finales de julio. Como en el primero, habrá temas compuestos por mí y también arreglos de standards».

Su próximo disco lo grabará en cuarteto, con los mismos músicos que le respaldan en esta gira, tres profesionales vascos del jazz: Mikel Núñez al piano (muy progragónico y colíder en el concierto), Aitor Bravo a la batería y el estajanovista Fran Serrano al contrabajo (ahora también acompaña a los manonegristas mirandeses de La Regadera). En este primer concierto del tour personal y del festival, Irati Bilbao en la Estación de Algorta, con el aforo completo y el sol bajando, ha cantado 11 temas en tres idioma y en 85 minutos, con ella segura, resolutiva y abarcadora de estilos y entonación.

Al poco de empezar declaró que es «un honor abrir el festival de Getxo, que todos los aficionados lo tenemos apuntados en la agenda. Es un placer veros a todos aquí». Y la pizpireta en el trato Irati, que por el contrario dio un concierto muy serio y sentimental, comenzó adulta, solemne y contenida, igualándose al soul de Filadelfia ('Anxious', 'Beatrice' de Sam Rivers aunque con letra remozada por ella), y a la tercera se desmelenó con el swing y las vocalizaciones de 'I'm hip', soy guay, como tradujo esta pieza grabada por primera vez en 1966 por Blossom Dearie.

'¿Hacia dónde?', el bolero de Marta Valdés, lo interpretó mejor que Gilda en el club nocturno, 'Bloom' (del próximo álbum) la mostró abandonada a lo Judy Garland mientras la banda la acompañaba con rotundidad conjuntado, no con liviandad de fondo (y el piano de Mikel Núñez volvía a aflorar protaggonista), y en 'The first time I heard Ella' se rindió a Ella Fitzgerald con la prestancia de una cantante de musicales antes de estirar el chicle de fresa ácida del swing y las vocalizaciones, ¡y con un ovacionado solo de batería!

Actualizó literalmente el swing del standard 'I'll close my eyes' (renovó una letra de los 1930s ya que la admiró la versión del trompetista Blue Mitchell), y también cambió la letra del 'Stoner Hill' de Brian Blade & The Fellowship Band, que le quedó muy dramática, melancólica e incluso pop, tendencia que continuó en el segundo adelanto de la sesión, 'Places', que entrará en su próximo álbum y que certificó la seguridad escénica y vocal adquirida por la duranguesa.

El bis fue doble, y a dúo con el piano cantó el original 'Hopefully my prince won't come', una bonita canción y largamente aplaudida con swing cuya letra se vio obligada a explicar porque usando el inglés se levantan barreras idomáticas (esa letra defiende que para ser feliz en la vida no es necesario casarse, ni tener dos hijos, un perro y un chalet en Marbella), y cerró en cuarteto con 'Mendian gora' de Imanol, no en vano Irati también es cantante y compositora de las letras del grupo de folk Sarrabete.

Y el primer cabeza de cartel del festival superó todas las expectativas. Ante 600 almas que llegaron a aullar de gozo durante su concierto creciente de 7 temas en 78 minutos, el James Carter Organ Trio, liderado por el saxofonista que lo nomina (sopló soprano, tenor y alto) y con el co-protagonismo absoluto de Gerard Gibbs al Hammond B3 (con las válvulas girando en escena), derramó sentido del humor (físico, sónico, entre ellos tres, para con el público, mediante la sonrisa del líder tan radiante como la del actor Will Smith), energía desde el primer instante y sapiencia absoluta desde la factura los ruiditos más que free propios de película de Hitchcock hasta la selección del repertorio, según el setlist con dos de Django, una de Lonnie Smith, 'A flower is a lovesome thing' de Billy Strayhorn…

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