Crítica de 'Con canas y a lo loco' (2022): El cuerpo del delito

Tercera película como directora de la también actriz Katie Aselton, que tiene de protagonista a una mujer que está harta de hacer todas las cosas que tiene que hacer para estar a la moda y poder llamar la atención a sus 30 años. En secreto le gustaría tener más de 60, relajarse, sin tener que seguir ninguna imposición. El miedo a ser uno mismo, a no aceptarse tal y como es, así como el paso del tiempo, son algunos de los temas que trata de forma superficial 'Con canas y a lo loco' (absurdo título español del original 'Mack & Rita'), en la que se intenta demostrar que aquel que es demasiado moderno corre el peligro de quedarse anticuado de repente.

Al crítico le gustaría aplicar la respiración artificial a la cinta y descubrir en ella algún atisbo de supervivencia. Lamentablemente, no admite reanimación, a pesar de los ímprobos esfuerzos llevados a cabo por Diane Keaton para dotar de vida a un personaje descrito a medias por la autora de 'The Freebie' (2010).

Porque no funciona el empeño de la protagonista a la hora de convertirse en una suerte de mandrágora, a la que este cronista le recomendaría: Contempla las Perseidas, fecunda la raíz de la mandrágora, enséñanos a oír cómo canta la sirena, a apartar el aguijón de la envidia, y a descubrir cuál es el viento que impulsa a una mujer de su época.

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