El temporal obliga al Gobierno vasco a preparar 205 máquinas quitanieves

Según las previsiones, podría nevar incluso a nivel del mar, como es el caso de la playa de La Concha en San Sebastián, cubierta desde primera hora por un fino manto. Así que este inicio de semana se presenta frío y gris. Bilbao tendrá unas temperaturas máximas de 9 grados, con 5 de mínima, exactamente la máxima de Vitoria, que ha tenido esta madrugada al mercurio un grado bajo cero. Y mañana seguirán bajando.

Varios lugares de Bizkaia han amanecido con el termómetro en valores negativos. En Oiz, la mínima es de -4 grados y la máxima es de -3, por lo que despedirán febrero con frío. Como en Orduña, donde las mínimas son de -3 y las máximas de -2. La estación de La Cerroja, en Karrantza, marca unas mínimas de -2 y máximas de -1. La del Puerto de Bilbao marca las temperaturas más altas, con 7 de máximas y 6 de mínimas. En la capital vizcaína ha caído un ligero aguanieve.

En Álava se ha vivido una noche de frío y viento. En Vitoria los primeros copos han aparecido, de forma muy tímida, al filo de las seis de la mañana. Desde ese momento, se han sucedido precipitaciones débiles de forma intermitente, aunque en otros puntos la nieve cae con contundencia. La estación de Herrera marca el récord negativo de la jornada con siete grados bajo cero. Allí, en las cotas más altas, peocupa el estado de la red viaria. Las cadenas son precisas para circular por los puertos de Herrera (A-2124), Kruzeta (A-2620) y Opakua (A-2124). Los dos primeros altos están cerrados para camiones y vehículos articulados desde primera hora de la mañana.

La alerta por la presencia de hielo y/o nieve se ha extendido a gran parte de las carreteras alavesas: la A-1 (Madrid-Irun), la autovía a Bilbao (N-622), N-240 (Legutio), N-624 (aeropuerto), así como numerosas carreteras comarcales.

Y en Gipuzkoa, la sorpresa se la han llevado los vecinos del centro de San Sebastián. Quien se haya animado al paseo matutino habrán visto una postal idílica de La Concha nevada. Además, un vuelo procedente de Barcelona con destino al aeropuerto de Hondarribia ha tenido que ser desviado a Loiu debido al mal tiempo. Pagozelai, en la frontera con Navarra, está completamente cubierto de nieve.

Euskalmet prevé para hoy precipitaciones débiles, que serán más abundantes durante las horas centrales. Será entonces cuando puedan caer copos hasta en la costa. Al final de la jornada, la cota ascenderá a 200 metros.

En el interior, y sobre los mil metros, los espesores de la nieve podrían alcanzar los diez centímetros, asegura la Agencia Vasca de Meteorología. El martes, la nieve seguirá presente, aunque el riesgo de verla en la playa se diluye. Podrá caer en torno a los 100-400 metros. El aviso amarillo por nieve se mantiene hasta el miércoles a las nueve de la mañana. Entonces la cota se situará entre los 100 y los 300 metros, con un espesor de hasta cinco centímetros a mil metros de altitud.

Como hemos dicho, la responsable de todo esto es 'Juliette', la décima borrasca de la temporada. Se dejará sentir, además, en toda la geografía española. Especialmente en el norte, eso sí. Y en Castilla y León, donde se esperan temperaturas mínimas de diez grados bajo cero en zonas como Ávila, Soria y Segovia. La nieve también visitará Burgos, según Aemet.

Lo que tenemos encima es una masa de aire muy frío, de origen ártico, que ha entrado por el nordeste peninsular este domingo y que piensa congelar los mercurios durante el día de hoy y mañana. Más de 30 provincias están en alerta. Solo se salvan Cataluña y el nordeste de Aragón. El descenso térmico traerá consigo, además, un desplome de las cotas de nieve en todo el territorio.

La situación más extrema podría darse en Baleares. Allí Mallorca se encuentra en riesgo extremo, sobre todo, la sierra de Tramontana, donde entre este lunes y este martes se podrán acumular unos 50 centímetros de nieve a partir de los 400 metros. Esta comunidad también tendrá alerta amarilla por lluvias y naranja por viento y oleaje.

A partir del miércoles, la mencionada masa de aire helado empezará a retirarse y con ello se recuperarán los termómetros de forma paulatina a partir del jueves, aunque las mínimas presentarán valores por debajo de lo normal, al menos, hasta el fin de semana. Al mismo tiempo en el norte de la Península y en el área mediterránea la inestabilidad será la tónica.