La red 'Púnica' llegó a diseñar a la carta los concursos públicos que luego ganaba
La sumisión de los alcaldes pasaba incluso por pedir permiso al 'número dos' de Granados para fijar las condiciones de las adjudicaciones
melchor sáiz-pardo
Viernes, 7 de agosto 2015, 00:48
No solo era información privilegiada o pago de comisiones para conseguir adjudicaciones amañadas. Las tretas que usaba la trama Púnica para hacerse con más de 250 millones en concursos públicos irregulares fueron mucho más allá, según revelan los pinchazos telefónicos. El grupo que dirigía Francisco Granados llegó al punto de autodiseñarse a la carta los concursos públicos a los que luego se presentaba y, obviamente, ganaba. Todo ello gracias a la absoluta sumisión de los responsables de las administraciones locales, muchos alcaldes del Partido Popular de la Comunidad de Madrid, que se plegaban sin problemas a las órdenes de la trama, a la que incluso pedían permiso o consultaban las condiciones de las futuras adjudicaciones.
Publicidad
Las intervenciones telefónicas en el verano de 2014 a las que la Guardia Civil sometió al número dos de Púnica, el empresario David Marjaliza, son fiel reflejo del verdadero vasallaje que los alcaldes le rendían por ser simplemente el alter ego y amigo íntimo de Granados. Paradigmático -según los propios investigadores- es el caso de Antonio Sánchez Fernández (del partido independiente UDMA), el regidor que fue detenido en octubre cuando trataba de sacar documentación de su despacho en plena redada. Sánchez, en julio del año pasado, en una conversación con el cabecilla de la red, no se anduvo con rodeos a cuenta del pliego para el concurso de unas instalaciones deportivas: «¿Quieres que las cambiemos?», le preguntó directamente el alcalde a Marjaliza.
La conversación da cuenta de cómo el empresario de Púnica decide cuántos puntos tiene que dar el ayuntamiento por cada concepto para poder amañar bien el concurso. «¿Que quieres justificar algo? Pues justifica... pon cinco puntos o seis más al tema constructivo y bajas lo otro. Y ya está», le explicó David Marjaliza, antes de recordarle que «me pones a las mejoras diez puntos, para si alguien viene con una locura... que tenga menos puntuación y ya está. ¿Vale?», zanjó el jefe de la trama. La respuesta del alcalde, por su sumisión, parece la de un verdadero subordinado: «Venga. Estupendo. Pues lo hacemos así. Muy bien».
Ese mismo tono de orden de jefe a subalterno aparece en muchas otras conversaciones entre Marjaliza y responsables políticos ya imputados, según recuerdan fuentes de la investigación, que también destacan el caso del regidor de Casarruebuelos, el popular David Rodríguez Sanz. El alcalde, también en julio del pasado año, llamó al empresario para pedirle una cita a fin de pedirle autorización para «llevar un tema al pleno extraordinario de septiembre». Marjaliza finalmente le citó en su propio despacho unos días después.
Órdenes tajantes
La situación en Valdemoro, el municipio que fue el centro de la trama y del que fue alcalde el propio Granados, es idéntica. Marjaliza manda como si lo hiciese en nombre de Granados. En otra llamada interceptada ese mismo verano, el entonces regidor de Valdemoro, José Carlos Boza Lechuga, se puso en contacto con la mano derecha del exconsejero de la Comunidad de Madrid para recibir instrucciones e informar al empresario de algunos «impagos». «Llama a alguien y aprieta», fueron las órdenes tajantes de Marjaliza al alcalde para conseguir cobrar esas deudas. «Ya, ya si yo estoy apretando a Jesús», fue la respuesta tímida del regidor.
Publicidad
«Pues llámalo otra vez y dile: oye macho remata este tema que nos pilla el toro», dispuso de nuevo el todopoderoso Marjaliza. El alcalde Boza intentó disculparse ante su jefe: «Es que ahora que no está Paco (Granados) me hacen menos caso».
La Guardia Civil incluye también en sus informes múltiples referencias al extremo sometimiento a Marjaliza del alcalde de Torrejón de Velasco, el popular Gonzalo Cubas Navarro (PP), cuñado del propio empresario. Las llamadas de Cubas a David Marjaliza para consultarle asuntos de gobierno del municipio son continuas. «Se ha podido constatar la influencia de Marjaliza sobre su cuñado, alcalde de Torrejón de Velasco, a quien llega a dar instrucciones sobre un pago que debe efectuar a un proveedor del Ayuntamiento una vez que él le entregue el dinero de una licencia», explican los informes incorporados al sumario. Marjaliza, siempre según los pinchazos, también ordena a su familiar cómo tienen que ser las adjudicaciones amañadas en el municipio a Cofely, la multinacional energética más beneficiada por la trama Púnica.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión