Zalla pone en valor su patrimonio histórico en La Herrera y Bolunburu

Mirar al futuro no está reñido con ocuparse del pasado, y en Zalla hay mucha historia que requiere la atención de las instituciones. Así, con unas semanas de diferencia, la localidad encartada será objeto de tres actuaciones diferentes para poner en valor su pasado: la realización de unos trabajos de emergencia en la ermita de San Antonio de Padua, en el barrio de La Herrera, que garantice su mantenimiento; la restauración a manos de la Diputación de la ermita de Santa Ana y recogida como Conjunto Monumental del Camino de Santiago, y una nueva campaña de excavación arqueológica en el castro de Bolunburu para documentar los sistemas de cierre de las viviendas que albergó la zona entre los siglos III a.C. y I d.C.

Los trabajos en el templo de San Antonio tendrán carácter de urgencia y se realizarán durante dos meses. El personal técnico del Ayuntamiento de Zalla confirmó el mal estado de la cubierta del edificio, que pertenece al conjunto monumental de La Mella, en el barrio de La Herrera. Las obras obligarán a apuntalar el interior y a instalar un andamiaje en la parte exterior. También será necesario desescombrar y desmontar la cubierta.

El conjunto monumental de La Mella podría verse afectado por el proyecto del viaducto de Malabrigo, el tramo más complicado de la mejora de la carretera BI-630 que la Diputación ha incluido en su plan de estímulo para la comarca. La plataforma ecologista Otsoaren Taldea realizó una recogida de firmas pidiendo un desvío de su trayectoria para proteger estos restos, así como la biodiversidad de la zona. También los técnicos del Consistorio de Zalla han estudiado los pormenores del proyecto recibido en julio para presentar sus alegaciones.

La ermita de Santa Ana, ubicada en el área recreativa de Bolunburu y que como en el caso de La Mella data del siglo XVII, será la Diputación la que intervendrá. La institución foral rehabilitará el edificio que desde hace siete años permanece vallado por el riesgo de derrumbe. La inversión será una inversión de 114.947 euros. Las obras durarán tres meses y supondrán la demolición del falso techo de la sacristía y el apuntalamiento del arco, entre otras medidas. También se eliminarán las grietas de los muros y la puerta de acceso, se recolocará la sillería se actuará en el raseo de las fachadas. La actuación respetará los elementos originales tanto como sea posible.

Además de rescatar dos edificios históricos en riesgo, Zalla también investigará este mes sobre otros mucho más antiguos. Será gracias a una nueva campaña arqueológica en el llamado Cerco de Bolunburu. En esta ocasión la excavación se centrará en la zona interior del recinto, definiendo el área de trabajo en una banda de 2 por 15 metros en el lado norte de una zona ya excavada.