La Náutica de Portugalete evoluciona para mirar al mar de forma más sostenible
La UPV/EHU pone en marcha el proyecto Itsasgunea basado en el uso de las energías solar, eólica y marina
Máster de periodismo EL CORREO UPV-EHU
Miércoles, 11 de mayo 2022, 12:11
De los barcos de madera que viajaban a vela hasta Terranova para cazar ballenas, a los que navegarán impulsados por las energías renovables. La UPV/EHU se pone de cara al mar y albergará el proyecto Itsasgunea en su Escuela Técnica Superior de Náutica y Máquinas Navales de Portugalete -popularmente conocida como la Náutica- para convertir el centro en un edificio sostenible basado en el uso de las energías solar, eólica y marina. Sobre la ría y a las puertas de El Abra, los futuros profesionales del mar contarán con un centro universitario que une tradición e innovación. Además, no se limitará a ser un centro formativo, sino que se abrirá a la ciudadanía para dar a conocer los proyectos y las investigaciones que se llevan a cabo.
La Escuela ha establecido lazos vitales y culturales con el mar, ya que la pesca, el transporte marítimo, las actividades de ocio y recreo en los puertos y playas contribuyen al desarrollo económico y social de Euskadi. Una relación que se remonta a hace casi 300 años, cuando en 1740 se puso en marcha en Bilbao la primera escuela náutica de España. Después fue trasladada a Portugalete en 1968, y su cometido estaba orientado a la formación de pilotos marinos y oficiales de máquinas. Desde entonces, la tecnología, los barcos y el mar han cambiado mucho. Charles Pinto, director de la Escuela de Ingeniería de Bilbao, considera que lograr «una transformación industrial y social sobre el transporte pasa por la potenciación de los barcos eléctricos». Un futuro que ya es presente y con el que José Vicente Ibáñez de Rentería, primer profesor de la escuela, quizás ya hubiese soñado en aguas del Cantábrico.
Para la adaptación de la escuela hacia un futuro más sostenible, funcional e innovador en el edificio universitario se acometerán trabajos de rehabilitación, recuperación y adaptación de espacios. Estas intervenciones están basadas en la utilización de recursos renovables y emplearán materiales de construcción de bajo impacto ambiental y ecológico, con una filosofía basada en la reducción, reutilización y reciclaje. El objetivo es convertirlo en un edificio sostenible.
Formación e investigación
La formación es el eje de esta escuela y la desarrollan la Escuela de Ingeniería de Bilbao con la colaboración de la Estación Marina de Plentzia y la Escuela de Administración Marítima del Gobierno vasco. Según Gorka Moreno, vicerrector del campus de Bizkaia de la UPV/EHU, el proyecto Itsasgunea pretende vincular los distintos centros de la Universidad Pública Vasca entre sí. Los estudios que se impartirán en Portugalete son el Grado en Náutica y Transporte Marítimo, Grado en Marina y un aprendizaje basado en la iniciativa de una embarcación sostenible. Este último consiste en el desarrollo del moderno 'Innoboat', un proyecto con el objetivo de diseñar, fabricar y probar un barco propulsado por energía sostenible y renovable. Una nave de última generación que podría convivir con el 'Saltillo', el barco escuela de vela que usan los alumnos. Esta actividad seguirá los ejemplos de tres proyectos ya consolidados en la UPV/EHU como el Formula Student Bizkaia, Moto Student y BiskyTeam.
Otro de los pilares de la Escuela Náutica de Portugalete es la investigación, donde cuenta con equipos que desarrollan sus actividades principales en objetivos en desarrollo sostenible con el mar, las energías renovables, el transporte, la navegación marítima y el turismo. La universidad potenciará pequeños proyectos de participación ciudadana centrados en los mismos objetivos. También se fomentarán las sinergias entre las entidades públicas y privadas de El Abra y Uribe Kosta, con el objetivo de favorecer la innovación y dinamizar la zona costera de Bizkaia y toda la comunidad autónoma. «Queremos que sea un centro de referencia, no solo como museo, porque para eso ya tenemos Itsasmuseum», explica Charles Pinto.
Por último, la Universidad impulsará las acciones de transferencia y divulgación de conocimiento. Para ello, la escuela revitalizará la zona con el proyecto Itsasgunea y promoverá la llegada de empresas de base tecnológica orientadas al mar. También se pretende organizar actos de divulgación a la sociedad para concienciar sobre la transición energética-climática. Además, se programarán actividades como charlas-coloquio o talleres, ciclos de debate, exposiciones permanentes y temporales. «El proyecto plantea que el edificio esté abierto a la sociedad y que la gente pueda ver qué estamos haciendo», apunta Gorka Moreno, invitando a todo aquel que quiera acercarse.
El proyecto Itsasgunea pretende que la renovación del edificio de la Náutica la consolide como un Centro Cultural Universitario para aunar las ciencias marinas. La formación y el conocimiento junto a la tradición y la innovación se combinan con la ría que no hace tanto vivió un constante tráfico de barcos con astilleros como el Euskalduna y La Naval. Ahora, las energías renovables se han convertido en pilar para los nuevos proyectos que se desarrollarán en la Escuela de Portugalete.
Itsasgunea priorizará las intervenciones más importantes debido al recorte en el presupuesto
El proyecto Itsagunea, en palabras del vicerector de la UPV/EHU, Gorka Moreno, materializará los lazos históricos y culturales de Euskadi, en general, y Portugalete, en particular, con la mar y potenciará la relación académica de la universidad con su costa. «Hemos mirado mucho a la tierra y no tanto al mar. Y aquí tenemos un legado valiosísimo al que hemos querido sacar partido», explica Moreno. Aunque el proyecto presentado por la UPV cifraba en cerca de 5.000.000 de euros la inversión necesaria para Itsasgunea, la inicitiava recibirá, al final, 1.250.000 euros, lo que, reconoce Moreno, llevará a «priorizar» algunas intervenciones por encima de otras.
La obra se llevará a cabo en la Escuela de Ingeniería de Bilbao en Portugalete, un edificio de más de 15.000 m², que incluye, entre otros, un salón de actos, el puente alto, una biblioteca, varias aulas, talleres y laboratorios y un pequeño planteario. El objetivo con estas reformas es, en definitiva, convertir la Escuela en un edificio sostenible, basado en la utilización de recursos renovables solares, eólicos y marinos. Esto, que se diversificará en distintas áreas de la escuela, tendrá una gran importancia en el devenir de la institución.
En palabras de Moreno, este proyecto «hará mucho más amigable» al centro respecto al entorno en el que se ubica. Esta renovación cambiará el Aula Magna, garantizará su accesibilidad y hará de ella un espacio en el que se pueden hacer eventos de gran tamaño. El hall de entrada del centro también será mejorado con la idea de que sea utilzado como un lugar de exposiciones. La Escuela de Ingeniería verá también cómo su aparcamiento externo y la terraza serán adecuados a las necesidades que crearán los eventos culturales y formativos que se celebrarán al aire libre.
«Éstas reformas harán mucho más atractiva a la escuela», explica el vicerector. De esta forma el lugar tendrá más vida académica y social, y así convertirlo en un lugar de encuentro entre la universidad y la población. En cuanto a la ejecución del proyecto, los tiempos «hay que cogerlos con pinzas debido a los problemas de suministros y de precios de materiales» cuenta. Los plazos orientativos del comienzo de estas reformas ubican el comienzo de las obras en principios de otoño de 2022. Por su parte, la intervención podría estar terminada entre abril y mayo de 2023.
