Hogar del jubilado de Gatika, uno de los municipios que carecen de cajero automático Maika Salguero

Tener un cajero automático a menos de 8 kilómetros

El Gobierno vasco quiere colocarlos en 21 localidades vizcaínas de más de 300 habitantes

Miércoles, 8 de octubre 2025, 00:54

Más de 24.000 vascos que residen en barrios o en zonas rurales, principalmente, se ven obligados a viajar varios kilómetros para acceder a un ... cajero automático. A este fenómeno se le denomina exclusión financiera. El Gobierno vasco, que quiere apostar por el relevo generacional en el sector primario para garantizar la soberanía alimentaria, pretende ir dotando a los municipios de servicios esenciales que eviten precisamente eso, el abandono de los pueblos. Por eso ha sacado a licitación por 1,15 millones la instalación de cajeros sin entidad financiera en 38 municipios vascos, de los que 21 están en Bizkaia, después de que decayese un plan anterior de instalar 34 en este territorio. Aunque son más los barrios o ayuntamientos sin este servicio, hay 26 municipios sin cajero cuyos vecinos deben desplazarse al menos cuatro kilómetros para sacar dinero. Allí se han acostumbrado a obtener efectivo para varios días y a pagar con tarjeta cuando pueden. En esta ocasión, si llega a buen puerto la licitación, los cajeros se instalarán en pueblos de más de 300 vecinos, sin cajeros ni oficinas bancarias, que tengan una distancia de más de ocho kilómetros al cajero más cercano o en localidades de gran afluencia turística.

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Los municipios

Ajangiz: 475 vecinos.
Amoroto: 394 vecinos.
Arratzu: 414 vecinos.
Arrieta: 579 habitantes.
Artea: 748 habitantes.
Arcentales: 736 habitantes.
Ea: 842 vecinos.
Elantxobe: 349 vecinos.
Errigoiti: 511 habitantes.
Forua: 949 habitantes.
Fruiz: 576 habitantes.
Garai: 342 habitantes.
Gatika: 1.633 vecinos.
Kortezubi: 444 habitantes.
Mendata: 380 vecinos.
Mendexa: 424 vecinos.
Meñaka: 767 habitantes.
Murueta: 322 vecinos.
Muxika: 1.545 vecinos.
Zaratamo: 1.611 vecinos.
Ziortza-Bolivar: 429 vecinos.

Así, los pliegos del contrato incluyen su instalación en Ajangiz, Arratzu, Amoroto, Arrieta Artea, Arcentales, Ea, Elantxobe, Errigoiti, Forua, Fruiz, Garai, Gatika Kortezubi, Mendata, Mendexa, Meñaka, Murueta, Muxika, Ziortza-Bolibar y Zaratamo. En el anterior plan, se preveía también la instalación en los barrios de La Arboleda, Zaramillo o Armintza y en las localidades de Arrankudiaga, Atxondo, Munitibar, Ubidea, Arteaga, Barrika, Laukiz, Etxebarria, Mañaria, Maruri-Jatabe, Morga, Sukarrieta, Galdames, Bedia, Zierbena, Ispaster, Mallabia, Lanestosa y Trucíos, entre otras.

31 de los cajeros deberán estar disponibles en los nuevos emplazamientos en el plazo de dos años y el resto, en 2029. Serán identificados con un logotipo del Gobierno vasco. La entidad bancaria adjudicataria deberá pagar la obra civil, la instalación, el cajero, la conexión a redes eléctricas y de datos, así como el mantenimiento continuo del servicio hasta que empiece el año 2030. La empresa que gane el concurso también tendrá que asegurar un servicio de 24 horas siempre que la ubicación lo permita y arreglar el dispositivo en un máximo de 15 días en caso de avería.

Además de ser accesibles, los cajeros deberán permitir la disposición y el ingreso de efectivo, el pago de recibos y tributos, tener lector de libretas, permitir realizar transferencias y recargar móviles e integrar tecnologías de seguridad avanzadas y 'contactless'.

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Personas de edad avanzada

Según los pliegos de contratación, «se constata una progresiva reducción de la presencia de oficinas bancarias y puntos de acceso al efectivo en las zonas rurales de Euskadi, debido a las pérdidas económicas que supone el mantenimiento de dichos servicios en zonas con una exigua utilización de los mismos. Esto significa un problema para determinados segmentos de población, no familiarizados con la banca digital, en especial a las personas de edad avanzada». La idea, por ello, es «evitar la vulnerabilidad en el acceso a los servicios bancarios en el medio rural y la brecha financiera», facilitando el acceso a servicios bancarios esenciales.

El Gobierno vasco pretende que tras la instalación de estos cajeros 22.500 personas queden cubiertas por servicios financieros básicos, el 96% de la población del medio rural y el 93% de los municipios vascos. Estarán, eso sí, fuera de la medida aquellos de menos de 300 vecinos, donde la inversión no resulta viable, recalcó la consejera de Alimentación, Desarrollo Rural, Agricultura y Pesca, Amaia Barredo. La iniciativa se enmarca dentro del proyecto 'Berosi', de Servicios Básicos para el Desarrollo Rural.

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