Durango levantará cuatro edificios residenciales con 145 viviendas en Arripausueta

Los vecinos del barrio de Arripausueta en Durango, rodeado de instalaciones deportivas como campo de rugby, canchas de tenis o pádel, verán en unos meses renovada su imagen. El Ayuntamiento anunció ayer que el proyecto de urbanización de la unidad residencial de esta zona, situada junto a Txibitena auzunea, avanza significativamente, con la planificación de cuatro nuevos edificios residenciales que sumarán un total de 145 viviendas, incluidas 50 de protección oficial.

La renovación de este ámbito no solo se limita a la construcción de los inmuebles, sino que también incluye la mejora significativa de la infraestructura local. Las obras comprenden el desarrollo de un vial de acceso, la instalación de una nueva rotonda y la conexión con los viales adyacentes de las calles Landako Etorbidea y Urko Kalea. Asimismo, se están mejorando las aceras y zonas de paso y estancia, junto con la prolongación del paseo peatonal a lo largo de la margen izquierda del río Ibaizabal, mejorando así la calidad de vida de los residentes y el atractivo de la zona.

Hasta la fecha se ha completado la construcción de dos de los bloques destinados a pisos de venta libre, y las obras en el tercer bloque continúan a buen ritmo. El Consistorio recibió ya el solar para la futura construcción de las viviendas de protección oficial, con planes de finalizar todas las obras de urbanización y abrir al público el espacio urbanizado antes de este verano. Esto incluye la ampliación del bidegorri de Landako, que facilitará una nueva conexión peatonal y ciclista con la zona trasera de las casas de Fauste Bekoa.

Con estas obras, la zona de la villa cercana al centro de salud público ganará paseantes en su recorrido habitual para continuar por el barrio de San Fausto y dirigirse hacia el polígono de Astola, ya en Abadiño.

Hay que recordar que durante el mes de agosto del año pasado el Ayuntamiento ejecutó mejoras en el skatepark de Txibitena, llevando a cabo labores de pintado para adecentar las paredes de la instalación deportiva a petición de los propios usuarios. Las mejoras supusieron un coste de 7.126 euros, y con estos trabajos se pretendió tapar las pintadas y reducir o evitar las que se puedan realizar más adelante.

Por otro lado, también se resolvió el problema del charco que se formaba en el skatepark tras las intensas lluvias acaecidas, para lo que el equipo de Gobierno formado por PNV y PSE estuvo en contacto con los skaters para resolver esta cuestión. Esta instalación alberga a numerososos practicantes de esta disciplina acrobática.

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