Detienen a un bilbaíno por 8 delitos de estafa y acude a declarar en un coche que nunca pagó

El arrestado, que cuenta con un largo historial delictivo, usurpaba identidades y clonaba páginas web de talleres de desguace legales para vender piezas que nunca llegaban al comprador

Martes, 30 de septiembre 2025, 11:47

Más de tres meses de investigación han sido necesarios para desenmascarar a un estafador que ha dejado víctimas por toda España y que ha sido ... detenido por los agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Comisaría de la Policía Nacional en Vitoria. El arrestado, un vecino de Bilbao, está acusado de nueve delitos de estafa relacionados con la venta de piezas de vehículos de desguace, según ha confirmado el Ministerio de Interior. Su modus operandi era tan específico y elaborado que desde el organismo reconocen que «ha dificultado notablemente la investigación».

Publicidad

Las pesquisas policiales se iniciaron el pasado mes de junio de 2025 cuando un vecino de Vitoria denunció que había sido estafado al adquirir el motor de un vehículo de alta gama en un desguace. La víctima relataba que había comprado la pieza a través de la página web de un taller de Móstoles (Madrid), luego había acordado la compra con el ahora arrestado vía telefónica y, posteriormente le había hecho la trasferencia bancaria por el precio acordado. Fue una operación «aparentemente transparente, ya que el estafador llegó a enviarle una factura justificativa del importe abonado haciendo uso incluso de los logotipos de un desguace, que existía realmente». El motor nunca llegó.

Los investigadores de la Policía Nacional comenzaron a recabar indicios para determinar la identidad del estafador pero «se encontraron con numerosas dificultades ya que hacía uso de filiaciones usurpadas de terceras personas que, por supuesto, desconocían que sus datos estaban siendo utilizados fraudulentamente». Con ellas, abría múltiples cuentas bancarias y contrataba líneas telefónicas, una técnica conocida como 'spoofing'. El entramado de nombres e identidades era tal que el rastreo del delincuente era casi imposible. Los agentes se topaban una y otra vez con personas inocentes que se enteraban de todo por los propios policías.

La red tejida por el detenido, un varón de 45 años, incluía el uso de «entidades bancarias on line (sin presencia física) a través de las cuales, gestionaba sus operaciones sin dejar rastros evidentes de su identidad real». Y en ocultarse el detenido era un experto ya que lograba burlar todos «sistemas de verificación de identidad robustos y seguros» exigidos por Ley a este tipo de bancos. Nuevamente mediante identidades robadas era capaz de saltarse la autentificación de la identidad del cliente, «no solamente con la presentación virtual de documentos y su cotejo sino también, mediante sistemas de verificación facial y con comprobaciones adicionales diferidas a terceras entidades previa presentación de su documentación». Algo similar hacía con líneas telefónicas desde las que operaba y con las que convencía a sus víctimas de la legalidad de las transacciones.

Publicidad

El delito número 9

La trama se cerraba con la usurpación de las páginas web de los desguaces. Lo hizo con al menos tres de estos negocios, ubicados en Málaga, Toledo y Madrid. En estos casos, sustituía los datos de contacto de las empresas por los suyos, «con lo que conseguía derivarse clientes que, de buena fe, consultaban las páginas web para adquirir sus productos». Tras meses de investigación, los agentes han logrado esclarecer al menos ocho delitos de estafa realizados en varias localidades de la periferia de Madrid, Palma de Mallorca, Valencia y Logroño, así como la propia de Vitoria.

Pero en Vitoria se le han imputado 9. El último lo cometió en un alarde de confianza extrema. Según desvela el comunicado del Ministerio del Interior, cuando «fue citado en la Comisaría de Policía Nacional de Vitoria para tomarle declaración, se pudo comprobar que había acudido a bordo de un vehículo que, previamente, le había sido apropiado indebidamente a su legítimo propietario con la excusa de probarlo, desapareciendo con él sin haber sido abonada su compra». Eso sí, tuvo la 'precaución' de estacionarlo en una zona alejada de comisaría para evitar que fuera detectado. No lo logró. El vehículo fue intervenido y devuelto a su legítimo dueño en calidad de depósito. Tras prestar declaración, el juez «ha decretado su puesta en libertad con medidas cautelares».

Publicidad

.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad