La desconocida ley vasca de protección animal
Los animalistas denuncian que se incumple la garantista norma autonómica, en vigor desde agosto de 2022 e ignorada por «técnicos y alcaldes»
Aunque el pasado 29 de septiembre entró en vigor a medio gas la ley estatal de protección animal, Euskadi cuenta con una normativa autonómica mucho más garantista desde agosto de 2022. Protege a todos, los animales aunque deja fuera la actividad regulada de la caza y de la pesca, los espectáculos taurinos, las pruebas y los animales de producción cuando están en sus granjas. Ampara a todos los perros, incluidos los utilizados para cazar o labores policiales, que quedan excluidos de la ley estatal. El Gobierno vasco pensaba recurrir la norma nacional, tan mediática, por invasión de competencias, pero al final la Administración General del Estado dispondrá que los registros de animales de compañía y criadores sean gestionados por las propias comunidades y que las «medidas obligatorias solo serán orientativas y vincularán cuando así lo establezca en cada caso la legislación autonómica».
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Ello preocupa a los animalistas. Aunque los animales queden protegidos en Euskadi, consideran «un desastre» que el articulado estatal se quede en papel mojado. «Veremos cómo acaba, pero que dejen las medidas como recomendaciones hará que no se puedan aplicar los artículos que merecían la pena y motivará a confeccionar normas autonómicas que excluyan a los perros de caza y a los animales más maltratados», se queja Ana Moreno, de la asociación Haiekin.
Los animalistas lamentan, además, que la ley vasca sea ignorada «sistemáticamente» por las administraciones. «Estamos llevando a cabo reuniones con los responsables de diferentes ayuntamientos, técnicos, concejales y alcaldes, y nos estamos encontrando con que muchos ignoran su existencia», denuncia Moreno, que está ofreciendo a los consistorios un modelo de ordenanza adaptado. Muchos, además, no están poniendo en marcha la esterilización de los gatos callejeros a la que están obligados. Recordamos algunos de los preceptos de la ley autonómica.
Castigos
Multas de hasta 100.000 euros por abandonarles
Además de considerarse un delito, abandonar, mutilar, esterilizar o sacrificar animales sin control veterinario y fuera de los supuestos legales es una infracción muy grave, castigada con entre 10.001 y 100.000 euros. También maltratarles (incluidos los perros de caza), causándoles la muerte o secuelas graves, envenenarles, drogarles en pruebas deportivas – recordemos el caso de los bueyes dopados con 'speed' en unas pruebas en Erandio–, adiestrarles para peleas y criar sin autorización razas caninas potencialmente peligrosas, así como su no esterilización dentro del plazo establecido. Denegarles el tratamiento terapéutico adecuado también es muy grave.
Seguro
Seguro de responsabilidad civil obligatorio desde 2022
Desde agosto de 2022, los dueños de perros en Euskadi están obligados a suscribir un seguro de responsabilidad civil, según el artículo 4 de la norma vasca, que recoge las obligaciones de los titulares de animales. Pueden hacerlo a través de una cobertura adicional de su seguro de hogar o contratando otro aparte que suele incluir gastos veterinarios imprevistos. La ley vasca no fija una cobertura de gastos mínima, aunque la estatal sí lo hará una vez se desarrolle el reglamento. Los dueños de perros potencialmente peligrosos siempre han tenido que disponer de un seguro que cubra daños de al menos 120.000 euros.
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Control
Los ayuntamientos, obligados a esterilizar a los gatos
La ley vasca obliga a esterilizar a todos los perros (y gatos) cuya titularidad se transfiera. Los de razas potencialmente peligrosas han de esterilizarse siempre, excepto los de cría. Los ayuntamientos, por otro lado, deben implantar el CER (captura, esterilización y retorno) para controlar a los gatos callejeros, aunque no todos lo hacen. Y tienen la obligación de registrarlos a su nombre. La ley estatal, por otro lado, insta a identificar y a esterilizar a todos los felinos, de ayuntamientos o particulares, antes de los seis meses de edad, salvo aquellos a nombre de criadores registrados.
Eliminación
Sin matar jabalíes en la ciudad y control ético de aves
En los centros municipales de atención animal se prohíbe el sacrificio de animales independientemente del tiempo que lleven allí. Una medida que ya aplicaban algunos consistorios. Los particulares tampoco pueden sacrificar a los animales cuando les venga en gana. Solo cuando tengan una dolencia incurable, un padecimiento físico o trastornos del comportamiento irrecuperables que les generen dolor o sufrimiento, previo informe veterinario. La eutanasia la debe aplicar este profesional. Además, la retirada de animales silvestres en vías urbanas, por ejemplo jabalíes o corzos desorientados, se deberá realizar «prioritariamente» mediante procedimientos que no causen la muerte del animal. Y para la gestión de aves urbanas, incluidas las tipificadas como exóticas, se favorecerán los anticonceptivos selectivos para la especie o el control de huevos. Por ejemplo, solo se podrá capturar y gasear a las palomas si hay informes que justifiquen, entre otras, el incremento poblacional.
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Vigilancia
Prohibido dejar a los animales sin supervisión más de un día
Según la ley vasca, queda prohibido dejar solos a los perros 12 horas excepto cuando se esté trabajando. Entonces, el plazo máximo es de 48 horas seguidas. El resto de animales no pueden estar sin supervisión más de un día.
La ley estatal, mientras, no permite dejar solos a los perros más de 24 horas y a «cualquier animal de compañía» más de tres días. La ley estatal, mientras, añade la prohibición de atarles sin supervisión, por ejemplo a un árbol, a una farola o a la entrada de un comercio. Ya se han interpuesto las primeras multas por ello. El importe mínimo es de 500 euros. Tampoco se les puede dejar dentro de vehículos o encerrados en balcones.
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Espectáculos
Sin sorteos de cerdos, circos con animales ni carruseles
La donación de animales en rifas, así como su exhibición en escaparates o en zonas visibles desde la vía pública se prohibió en 2022. De hecho, ya «no se ven perros y gatos en los escaparates», aseguran los animalistas. También los circos con animales y las atracciones como carruseles y otras que utilicen animales domésticos o silvestres fueron censuradas. Tampoco se pueden tener, ni para dar en adopción, perros y gatos en las tiendas. El comercio de animales solo puede ser realizado por los criadores autorizados. No se pueden transmitir ni donar antes de los dos meses de edad y han de estar registrados antes de hacerlo. La compraventa de animales entre particulares está penada por la ley autonómica desde 2022.
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