Bizkaia registra este sábado su tercer día más lluvioso del año

Las precipitaciones han sido constantes desde primera hora de la madrugada y, al margen de pequeños descansos en los que incluso se ha podido ver algún rayo de sol, han estado presentes en la mayor parte de la jornada. De hecho, apenas se han producido fenómenos tormentosos, como lo corrobora que la máxima horaria de lluvia en la provincia hayan sido 3,8 litros en Berriatua. Además, el agua ha estado muy repartida por todo el territorio, ya que en la mayoría de las estaciones se han recogido más de 20 litros por metro cuadrado.

Consultados los datos de estaciones de Euskalmet, solo dos jornadas este año han superado estas cifras. La primera lo hizo de largo el pasado 9 de enero cuando la provincia se anegó con más de 70 litros por metro cuadrado esa jornada. Alguna instalación meteorológica como la de Oiz o la de Untzueta en Orozko llegaron a registrar 100 litros en 24 horas. Y municipios como Otxandio, Urkiola o Muxika se acercaron mucho. Incluso en pleno Bilbao cayeron 88 litros.

El otro gran aguacero que ha soportado Bizkaia este año está mucho más cercano en el tiempo. Se produjo el pasado 29 de septiembre. Cayeron más de 47 litros por metro cuadrado aquel día. Entonces, como este sábado, su distribución estuvo muy repartida y, salvo Orduña que registró apenas 10 litros, prácticamente en todas las demás se superaron los 30.

Respecto a la temperatura, también hace mucho que no se soportaba tanto frío en las calles. Las mínimas, de hecho, han llegado a quedarse a apenas medio grado en puntos elevados como Orduña, y muchos puntos, incluso en la costa, casi bajan de los cinco. Y las máximas no han sido para tirar cohetes ya que, si bien en Zaratamo se han registrado 15,4 grados, el termómetro en la mayoría de las localidades se ha movido entre los 9 y los 12.

Desde Euskalmet han remarcado que este repentino mal tiempo se debe a la entrada de «varios frentes asociados a una extensa y profunda depresión atlántica». De hecho, las mismas fuentes han avanzado que «el lunes y el martes» la situación puede incluso recrudecerse un poco más impulsada por la entrada de una masa «de aire frío en capas medias que hará descender la cota de nieve por debajo de los mil metros».

Mañana domingo el cielo parece dispuesto a dar una tregua. Aunque amanecerá encapotado y dejará caer precipitaciones débiles, con el paso de las horas tenderá a disminuir la nubosidad y la lluvia «remitirá por la tarde-noche». Eso sí, el lunes se dará la situación inversa y el día empeorará sobre todo en su segunda mitad, cuando hay posibilidad de que se desaten tormentas localmente fuertes. El martes seguirá igual, aunque por la tarde remitirá el agua.