El Ayuntamiento de Bilbao alerta de la mala calidad del aire por la llegada de polvo sahariano

El Consistorio, en una nota dada a conocer este martes, aconseja a los bilbaínos no realizar actividades de gran esfuerzo físico al aire libre en las horas centrales del día y utilizar en la medida de lo posible el transporte público en los desplazamientos. En especial, a las personas que padecen trastornos respiratorios crónicos, así como enfermedades cardiovasculares y diabetes.

También se recomienda evitar el contacto con agentes que puedan ocasionar alergias y agravar la sintomatología asociada a la contaminación atmosférica como polvo, polen o animales. Para ello, es importante mantenerse informado sobre la evolución de los niveles de contaminación en las áreas de residencia o recabando toda la información en la página web oficial de Información de la calidad del aire en Euskadi.

La llegada de este polvo en suspensión sahariano coincide con el aumento de las temperaturas en Bizkaia. La combinación de ambos elementos es lo que puede provocar que el aire se convierta casi en irrespirable para muchas personas. De momento, la calidad del aire se mantiene en unos niveles moderados, aunque subiendo a medida que pasan las horas.

No es la primera vez que Bizkaia sufre los rigores de la calima, ni mucho menos. Sin ir más lejos, el territorio sufrió un episodio similar en diciembre de 2024, aunque es más recordado el ocurrido en 2022, cuando las calles llegaron a cubrirse de un fino manto naranja.

El polvo en suspensión llega del Sáhara debido a las altas temperaturas que se alcanzan en el desierto y las corrientes. Su impacto en la degradación de la calidad del aire, en la salud y el medio ambiente están fuera de toda duda. La Organización Mundial de la Salud considera que el tope máximo diario considerado saludable es de 50 microgramos por metro cúbico de partículas en suspensión, conocidas técnicamente como PM10.