El físico de Anosike abre las dudas
El Baskonia medita el futuro del pívot norteamericano por unos problemas en su rodilla
Daniel Sánchez-Harguindey
Viernes, 25 de septiembre 2015, 20:55
Parecía un verano de lo más tranquilo en el Laboral Kutxa en lo referente a los siempre recurrentes problemas físicos con los que convive cada ... pretemporada, hasta que ayer saltaron las alarmas acerca del estado de OD Anosike, uno de los cuatro fichajes efectuados para el nuevo curso. El pívot, contratado para dotar de músculo y potencia a la pintura baskonista, ha suscitado dudas en torno a su capacidad física. Ya se sabía que no llegaba en calidad de estrella y también que su punto de forma no era aún el idóneo -algo reconocido por él mismo-, pero unos problemas en la rodilla han levantado las alarmas en las oficinas del Buesa. Tanto como para dudar de su continuidad.
Publicidad
El estado del jugador fue un asunto tratado ayer en una reunión mantenida en el Bakh entre el presidente, Josean Querejeta; el entrenador, Velimir Perasovic; el director deportivo, Félix Fernández; y el responsable de scouting, Alfredo Salazar. Un encuentro en el que se valoraron diversas opciones, desde la permanencia del pívot a sus condiciones físicas. Horas después, el propio jugador publicó en su cuenta de Twitter un mensaje críptico: «Siempre es mejor tarde que nunca, pero nunca tarde es mejor». Unas palabras muy ambiguas pero que dan a entender la existencia de un caso Anosike.
De rango medio
El club apostó en el mercado de verano por un pívot de un caché barato y de relevancia media, que, eso sí, demostró su poderío en la Lega la temporada pasada. No en vano, capturó once rebotes por choque, a pesar de su baja talla (2,03). En la entidad se pensó que esa capacidad atlética podría cumplir un papel necesario en la zona azulgrana. Al menos, por la carencia de un elemento de estas características.
Llegaron los entrenamientos y también los primeros amistosos y Anosike apenas ha destacado. En los dos encuentros de preparación celebrados a puerta abierta se le ha percibido especialmente desubicado en un engranaje nuevo para él. Pero, claro, en pretemporada es cuando los jugadores van adquiriendo la forma, un aspecto subsanable con el tiempo. La aparición de unos problemas en la rodilla eleva los problemas a otra dimensión. Y aquí se abren las dudas.
Publicidad
Por una parte, parece pronto para cortar a un jugador cuando la campaña oficial ni siquiera ha empezado a rodar, quedan meses para lograr una rehabilitación. Por otra, el pívot no es una estrella, no está llamado a ejercer de primer espada, por lo que el club dispone de margen para decidir. Y no solo una flexibilidad temporal, sino de estructura, puesto que aún dispone de una plaza libre para un jugador extranjero. Otra cosa es que su economía limite cualquier movimiento. Una hipótesis de trabajo podría ser la de permanecer con los jugadores actuales y efectuar cambios en función de los acontecimientos o disponibilidad en el mercado; algo que por otra parte ya se hacía hasta ahora pero sin poner el foco directamente en el norteamericano.
Calma rota
Hasta el momento, la pretemporada baskonista transitaba bajo una calma inusitada en cuanto a lesiones y dolencias. Este problema se había convertido en una lacra en los veranos azulgranas, pero en esta ocasión la enfermería azulgrana se encuentra desierta. Solo las ausencias de Perasovic y Shengelia, inmersos en el Eurobasket, han impedido que la formación esté al completo.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión