El viaje de Conechny: «Era la joya, llega en su mejor momento a Europa»

«Comodoro es una ciudad muy ventosa de la que no salen muchos futbolistas. No es Rosario, Córdoba... », explica a EL CORREO Claudio Mauri, periodista de 'La Nación', para desmenuzar los orígenes de Conechny. Su apellido polaco de difícil pronunciación es tan indescifrable como el fútbol de un atacante que aterriza en el Alavés lleno de ambición.

«Sueño con meter a este equipo en lo más alto de Europa», afirmó en su presentación. Sin embargo, antes de llegar a Vitoria con 26 años, recorrió miles de kilómetros camino de la élite. Del CAI (Comisión de Actividades Infantiles) de Comodoro saltó a San Lorenzo, debutando en Primera con 16 años en 2016.

Ya con 14, el Liverpool trató de ficharle sin suerte. «Recuerdo que todos hablaban de él como la joya, con unas condiciones bárbaras. Era muy respetuoso, aplicado y con grandes cualidades técnicas, que le permitían destacar sobre el resto en los entrenamientos. Un chico con una gran calidez humana, profesional, pero al que le llegó todo muy de golpe», apunta a EL CORREO Marcela Nicolau, exjefa de prensa de San Lorenzo.

Un 'boom' siendo un adolescente que le costó asimilar. «Me ponía muchas presiones internas. Y guardármelas fue malo para mí. Lo fui trabajando con las experiencias vividas. Tuve charlas con psicólogos que me ayudaron a darme cuenta de lo que me pasaba. Los jugadores somos personas, no robots», dijo Conechny en 'Tiempo Argentino'.

Mientras asomaba en Primera, Conechny brillaba en la Albiceleste. En el Sudamericano sub17 de 2015 en Paraguay, el albiazul fue capitán y marcó cinco goles, pero se perdió el duelo clave ante Ecuador por un inusual accidente. «Soy el único futbolista que se lesionó jugando a la Play. Estaba apoyado en la ventana de la habitación cuando se rompió el cristal y me caí. Tenía cortes en todas las piernas. Ahora me río, pero pudo ser grave», detalló.

Después, saltó a la sub 20 para competir en el Mundial 2017 de Corea del Sur con campeones del mundo como Foyth, Lautaro Martínez, Montiel, Lisandro Martínez y Palacios. Entre ellos sobresalía un Conechny con el '10' a la espalda que portará en el Alavés.

Sin embargo, aunque llegó a entrenar con la absoluta argentina, no logró consolidarse en San Lorenzo. En 2018, se fue a los Portland Timbers. Tampoco se asentó en la MLS estadounidense jugando después en el Deportivo Maldonado uruguayo (2021) y en Almagro (2022), en la segunda argentina. Ahí despegó y volvió a Primera división para 'romperla' con Godoy Cruz (cinco goles y cinco asistencias en 2024)..

«Encontró su lugar. Va a tener su primera experiencia europea en el mejor momento de su carrera. Estos dos últimos años fue el mejor delantero de su club y uno de los más destacados de la liga argentina», declara Mauri. «Cuando debutó aún le faltaba la maduración necesaria que le permite ahora mostrar todo su potencial. Tiene todo para competir en LaLiga», señala Nicolau.

El propio Conechny se autodefinió en su presentación con el Alavés: «Soy versátil, juego en todas las posiciones de arriba. Izquierda, derecha, mediapunta, falso nueve... No tengo problema». Mauri mete un poco más el bisturí en el análisis futbolístico: «Es un delantero bastante explosivo, con un tren inferior fuerte. En juveniles dijo que su referente era Agüero. No es el Kun pero su estilo se asemeja. Es encarador con la pelota y muy potente en la arrancada y a la hora de llegar a zona de definicion. Además, tiene buen remate y cabezazo, aunque no es muy alto (1,70 metros)».

Nicolau completa su radiografía: «En el Alavés se van a encontrar con un delantero zurdo de gran técnica y que llega a gol con potencia. Se puede mover por las bandas y también por el centro del área». La polivalencia es su fuerte. «Tiene una posición específica que es la de extremo izquierdo, pero también la capacidad de actuar de segunda punta, banda derecha e incluso de '9' para atacar espacios. Posee muchas características que nos enriquecen como equipo», aseguró Sergio Fernández. Lo remata Conechny: «Me siento identificado con el estilo aguerrido del club. La entrega no se negocia». Puro pundonor.