Otro rompecabezas para Machín

El galo es duda, puede llegar al partido del domingo, pero los problemas se acumulan en la zaga para un Machín obligado a improvisar desde el inicio del campeonato. Primero en los carriles, encargados a dos extremos reconvertidos como Edgar y Luis Rioja. Después, ante la falta de centrocampistas, con la configuración táctica, protegiéndose en un 4-4-2 donde la plantilla albiazul reunía más automatismos. En el derbi innovó con un sistema híbrido que atacaba con zaga de tres –Duarte más adelantado– y defendía con línea de cuatro –el andaluz retrasaba su posición y Pere Pons se escoraba a la izquierda en el centro–.

Ahora puede verse privado de los tres defensas con más minutos del plantel –Laguardia (418), Duarte (386) y Lejeune (360)–. El cuarto es Ximo Navarro (314), que se presume fijo en el once tras el buen rendimiento ofrecido ante el Athletic, tanto en defensa de tres como en el lateral derecho. Después va Rodrigo Ely (168), que, tras el fallo en Granada que le condenó al banquillo en los tres partidos siguientes, se reivindicó con el gol decisivo ante los bilbaínos. A partir de ahí, si Lejeune no llega a tiempo para el domingo, empiezan los problemas para el técnico albiazul.

La alternativa en el esquema de tres centrales es Tachi, inédito en el presente curso, con 237 minutos en su primer año como albiazul. En su defecto, seguir apostando por el 4-4-2 hasta recuperar piezas en la zaga. Ahí, con Ximo en el eje, se abre la puerta de la titularidad por primera vez en el campeonato para Martín (2 minutos) en el lateral derecho –Tavares aún no ha entrenado con el equipo–, y Javi López (49) y Adrián Marín (0) en el izquierdo.

O seguir inventando. Porque si algo ha demostrado Machín en cinco jornadas es que es un técnico intervencionista. Ha cambiado y retocado un sistema que en su libro de estilo parecía innegociable, tanto de una jornada a otra como en un partido, ha movido piezas y se ha adaptado a unas circunstancias desfavorables en busca de la solidez de su equipo que, con sus defectos, ha dejado la portería a cero en dos ocasiones, las dos en casa –Getafe (0-0) y Athletic (1-0)–.