El Huesca sondea la profundidadde la evolución albiazul 

«Vamos a ser honestos, seguro que el equipo lo nota». Pablo Machín no se refugia en tópicos futbolísticos para hablar de las bajas de dos jugadores «determinantes» como Battaglia y Lejeune en el duelo ante el Huesca (El Alcoraz, 18.30 horas). «Perdemos un 20% de nuestro once inicial». Son dos titulares indiscutibles. Más importante, a priori, la ausencia del argentino, el ancla del equipo, expulsado ante la Real Sociedad por decirle a un compañero que el colegiado estaba «ciego». Le oyó, le expulsó y le han caído dos partidos de sanción. «Acostumbrados a lo que escuchamos en un campo, tampoco es una frase tan contundente, no es ningún insulto, y no se dirige al árbitro», reflexiona el entrenador alavesista.

Una baja sensible por la importancia capital de Battaglia en el esquema de Machín y porque se une a otras ausencias en la zona –Pere Pons y Manu–, lo que deja al técnico albiazul con lo justo en el centro del campo. Pina, Jota y Sergi, del filial. En el Aficionados también está Abdallahi, pero, inmerso en un proceso de renovación atascado, lleva jornadas sin contar para el primer equipo. «Hay situaciones que no corresponden únicamente al entrenador, sino que son cuestiones de club. Ya no es que pueda renovar o no, ha tenido alguna lesión y fases con su selección, no ha tenido esa continuidad para llamar realmente a la puerta y que el entrenador crea que nos va a ayudar inmediatamente porque su nivel es superior al que nos puede dar otro compañero», explica el soriano.

En este contexto, la alternativa más lógica pasa por centrar la posición de Jota, escorado a la banda en los últimos partidos, para formar un doble pivote con Pina y dar entrada a Edgar en la derecha –opciones para Tavares y Martín–. En defensa, a priori, hombre por hombre, Rodrigo Ely por Lejeune. La variante de los tres centrales parece descartada por el momento. «Si una de las circunstancias con las que jugamos más con cuatro fue porque faltaban centrocampistas específicos, ahora tenemos más dificultad aún. No nos ayudaría», argumenta Machín.

Enfrente, un Huesca que «genera mucho más de lo que dicen los puntos» que tiene en la tabla, donde figura como colista. «Ahora viene una fase de rivales más directos y dejamos atrás una buena con equipos contra con más potencial que el nuestro», subraya el entrenador albiazul. Que está muy bien emocionar con triunfos de prestigio y puntos épicos, pero es ahora cuando la Liga va a exigir su medida real al Alavés.

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