El prometedor Carlos Martín completa la renovada parcela ofensiva del Alavés
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El madrileño, de 22 años, llega cedido por un curso desde el Atlético después de marcar 15 goles con el Mirandés en SegundaEl Deportivo Alavés buscaba con ahínco en el mercado un defensa central y un delantero centro para cerrar su plantilla y el ariete ya lo ... tiene. Carlos Martín abrocha la parcela ofensiva del equipo vitoriano para el curso que acaba de arrancar. El atacante madrileño aterriza en Mendizorroza cedido por una temporada desde el Atlético de Madrid, tal y como anunciaron ayer ambas entidades. Un movimiento que el club albiazul llevaba trabajando semanas y que tenía encarrilado, pero que dependía de que todas las piezas encajasen para que la entidad colchonera diera luz verde al préstamo. Aunque no pudo llegar al estreno liguero, Martín sí estará disponible para la reapertura en Mendizorroza el próximo domingo ante el Betis.
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El club vitoriano estaba bien posicionado para conseguir el préstamo de una de las grandes sensaciones del ejercicio anterior en Segunda. Ese temprano interés, sumado a las buenas relaciones que mantiene con el Atlético, ha resultado clave para que haya logrado adelantarse a clubes como el Getafe, Espanyol o incluso algunos extranjeros que también pretendían su fichaje. No en vano, veían en Martín un delantero que combina un futuro prometedor con un presente ilusionante. Con 22 años recién cumplidos, cuenta como principal aval con los quince goles que marcó la temporada pasada en el Mirandés. Golear en Anduva le ha abierto de par en par las puertas de Primera.
Será en Vitoria donde se curta. Un camino de ida y vuelta que ha dado probados frutos recientemente. Samu Omorodion como Giuliano Simeone aterrizaron hace doce meses desde el Metropolitano a préstamo para buscar en el Alavés los minutos que difícilmente iban a lograr allí. Ambos, en contextos muy diferentes, cumplieron con nota alta. Tanto que el club pretendía alargar la cesión del segundo. El movimiento estaba avanzado, pero el Atlético optó la semana pasada por cambiar de estrategia y quedarse a Giuliano en su primera plantilla. Ese movimiento ha facilitado la llegada de Carlos Martín, al que le une una gran amistad, a Vitoria. También el reciente fichaje de Julián Álvarez por el club colchonero ha allanado el camino. Sin hueco en Madrid, el Alavés le ofrece un trampolín para asentarse en la élite.
Otro perfil para el ataque
La llegada de Martín colma además las expectativas del Alavés en su búsqueda de un broche para la delantera. Con Kike y Villalibre como referencias que, aunque con matices, comparten características, la nueva adquisición se perfila como un delantero de otro corte. El punta de «otro perfil diferente» que, como Sergio Fernández señaló en una comparecencia reciente, buscaba la dirección deportiva. También Luis García le dio el visto bueno en la previa del duelo ante el Celta. «Se adapta a lo que buscamos», explicó. «Tiene mucha polivalencia: puede jugar de '9', en la banda, de mediapunta... Buen jugador de Primera División», apuntó ya el entrenador sobre un atacante de 1,80 metros más móvil, veloz y versátil que sus compañeros en la punta de lanza albiazul.
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Su llegada completa, salvo sorpresa, el apartado de adquisiciones en la renovada parcela ofensiva del Alavés. Solo queda pendiente por definir el futuro de un Luis Rioja por el que el club no ha recibido nuevas ofertas. Martín es el quinto fichaje ofensivo del equipo después de las incorporaciones de Tomás Conechny, Stoichkov, Luka Romero y Asier Villalibre. El madrileño, como varios de ellos, pone la versatilidad a su favor. Porque si bien es un delantero centro, también se siente cómodo acompañado de una referencia más adelantada o en la banda. Esa polivalencia ha hecho incluso que 'El Cholo' le haya colocado de carrilero en los amistosos veraniegos. Su venida puede ahora desbloquear la cesión del joven argentino Panichelli al Mirandés.
Martín, nacido en Torrejón de Ardoz (Madrid), entró en la cantera del Atlético en 2008 con apenas seis años y siempre ha sido una figura muy bien considerada por los técnicos de la casa. En 2021 dio el salto al filial, con el que marcó doce goles en Tercera. Un año después elevó su cuota hasta los 20 en Segunda RFEF y debutó con el primer equipo. Entonces el Mirandés apostó por él, respondió con creces y ahora busca hacerlo en la elite en las filas del Alavés.
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