El 'Bosque de los Gudaris': acceso sólo con invitación

Sólo los más fieles, una militancia cualificada del entorno de ETA, podía acudir a los homenajes que cada mes de marzo desde mediados los noventa tenían lugar en el 'Bosque de los Gudaris' del monte Aritxulegi (Gipuzkoa) en recuerdo de los etarras fallecidos. Para acudir era necesario tener invitación y los organizadores establecían controles de acceso por motivos de seguridad.

La Guardia Civil desmanteló ayer el 'Bosque de los Gudaris' del monte Aritxulegi, en la localidad guipuzcoana de Oiartzun, y detuvo bajo la acusación de enaltecimiento del terrorismo a cinco personas que, presuntamente, organizaban en el collado homenajes a etarras muertos. En el transcurso de la 'operación Roble', desarrollada desde primeras horas de la mañana, los agentes procedieron a identificar a otras seis jóvenes que a lo largo de la tarde fueron citados para prestar declaración en el cuartel que el instituto armado tiene en el barrio Intxaurrondo de San Sebastián.

Según la investigación de la Guardia Civil, la militancia de ETA elaboraba cartas de invitación dirigidas a los familiares de los miembros de la banda terrorista que hubiesen fallecido durante el año anterior, a expresos de la banda y a militantes cualificados de las organizaciones de la Izquierda Abertzale, asegurando así la asistencia de un nutrido grupo de militantes comprometidos.

Una vez allí, se les exigía la presentación de las mencionadas invitaciones para acceder por las vías públicas al monte Aritxulegi, lo que confería al acto un carácter público pero con estrictas medidas de seguridad dado el posible carácter ilícito del evento, al que únicamente asiste la militancia más cualificada. La asistencia media era de entre 600 y 700 personas.

Según informa Interior por medio de un comunicado, así sucedió en el último homenaje celebrado el pasado 9 de marzo en recuerdo del que fuera jefe de ETA Francisco Javier López Peña, alias 'Thierry', y Arkaitz Bellón Blanco, fallecidos el pasado año 2013. El acto consistió en la plantación de dos robles en su honor.

Preparación de los homenajes

Para que el acto fuese un éxito, se coordinaban las actividades de todas las organizaciones del entramado de apoyo a ETA al objeto de asegurar la máxima asistencia. Previamente, un grupo de personas preparaban el lugar con trabajos de jardinería, colocaban la placa conmemorativa y el mástil para izar la ikurriña en el monolito, unas tarjetas plásticas de color verde sobre cada roble para identificar cada árbol con el miembro de ETA al que homenajea y unos claveles rojos.

También preparaban la megafonía para los discursos y acompañamientos musicales, se repartían ikurriñas y banderolas a favor de los presos entre el público asistente y octavillas en las que figuraban los miembros de ETA homenajeados y el lugar de ubicación de su roble correspondiente.

Ya durante el acto se procedía a izar la ikurriña y un paseo de caballos con jinetes que portan ikurriñas y banderas de Navarra. También una ofrenda floral sobre el monolito, la plantación de nuevos robles en función del número de fallecidos ese año. Al final se interpretaba el 'Aurresku', se realizaban discursos y se cantaba el himno 'Eusko Gudariak / Soldado Vasco'.

El lugar estaba compuesto por 239 esquejes de roble, que se corresponde con cada uno de los miembros de ETA fallecidos como consecuencia de su actividad terrorista o durante la misma, identificados con una placa numérica (de nº1 al nº 239), una alambrada perimetral y un monolito preparado para la colocación de un mástil y una placa cuando se celebran los actos homenajes.

239 estacas

El homenaje en el 'Bosque de los Gudaris', se realiza con un doble objetivo: por un lado, se ensalza la figura de todos los 'Gudaris / Soldados' caídos, es decir, de todos los miembros de ETA fallecidos como consecuencia de su actividad terrorista; por otro lado, se lleva a cabo la plantación de un nuevo árbol por cada terrorista de ETA fallecido en el transcurso del año anterior, reconociéndoles públicamente y concediéndoles el honor de formar parte del mausoleo.

La Guardia tras detener a los cuatro máximos responsables de estos homenajes e identificar a un grupo de seis personas más por su implicación activa, ha procedido a retirar del lugar las estacas que servían de homenaje a los etarras fallecidos.