Iruña Veleia tendrá un nuevo centro de visitantes y un jardín 'arqueológico'

Se cambiará la configuración de la zona de acogida de turistas. Pues ahora lo primero que se encuentra el automovilista es el centro de visitantes y después, el aparcamiento. Lo que se busca es tirar de lógica y que primero se estacione el coche o el autobús y después el visitante pase por una serie de módulos en los que se explicará la enorme historia que envuelve a Iruña Veleia.

El nuevo parking se reubicará en el borde sur para tratar de reducir la influencia del tráfico rodado y se habilitará con materiales naturales como aripaq. Es decir, se sustituirá la grava por un pavimento con aspecto de tierra compacta que está compuesto por vidrio micronizado, arenas naturales y hormigón reciclado.

El pabellón de visitantes contará con varios módulos. Se habilitará un atrio de acceso y un aula exterior que funcione para la puesta en valor de la calzada Iter XXXIV y el Macellum, además del trazado del río Zadorra y los Montes de Vitoria. Este espacio se acondicionará con materiales naturales y especies vegetales locales con bajas necesidades hídricas para lograr su total integración paisajística y mantener la biodiversidad de la zona.

«Esto permite que el edificio no solo sea un contenedor funcional, sino un lugar que articula y enriquece la experiencia del lugar. Los espacios interiores y exteriores están pensados para dialogar entre sí y con el entorno, creando recorridos que conectan visual y físicamente el yacimiento, el paisaje circundante y las áreas de la intervención», explican los creadores de esta propuesta, que indican que se ha diseñado para poder incorporar nuevos módulos adjuntos a los previstos.

El proyecto indica que, a medida que se aproxima a las ruinas, la intervención se reducirá hasta ser mínima para preservar el paisaje mientras se mejora la experiencia informativa, otorgando valor y sentido al recorrido por la antigua ciudad romana que poco a poco se va descubriendo.

Al concurso de ideas organizado por la Diputación se habían presentado quince propuestas y finalmente se ha elegido la presentada por Olavarrieta-Madev. El jurado les ha elegido «por el concepto arquitectónico, el concepto a nivel paisajístico y urbanístico, el concepto de instalación y eficiencia energética y el rigor y viabilidad potencial de la propuesta». La empresa se repartirá 16.000 euros junto a Conjunta Proyectos y Cánovas Arquitectura, que han quedado en segunda y tercera posición.

«Es una obra que, cuando se realice, mejorará las instalaciones actuales, para conseguir una experiencia de visita agradable y enriquecedora y en el que además de contribuir a convertir el yacimiento en un recurso turístico de calidad, ayude a transmitir los valores guía del proyecto», ha señalado la diputada de Cultura, Ana del Val. En cualquier caso, el formato de concurso de ideas no significa que el proyecto planteado se vaya a desarrollar al 100%, sino que los técnicos de la Diputación procederán a incluir posibles mejoras hasta redactar un proyecto ejecutivo definitivo.