El colectivo LGTBI+ y el Ayuntamiento condenan la agresión tránsfoba en Abetxuko

La condena es rotunda. Vitoria vive en 10 días dos agresiones contra mujeres trans. La primera fue el pasado 22 de julio en un bar del Casco Viejo. Eva Echave, de 64 años, recibió puñetazos en la cara por su agresor, ya detenido, al grito de «maricón de mierda». El lunes se conocía una segunda agresión en Abetxuko. El pasado fin de semana una mujer trans fue agredida sexualmente por un hombre que portaba un cuchillo. El observatorio Ikusgune le mandó ayer todo su apoyo. Con este ataque son ya 15 las incidencias registradas desde el mes de mayo, más que durante el mismo periodo del 2020, advierten.

En este caso, la mujer de 38 años se presentó a las diez de la noche en la comisaria de Aguirrelanda descalza y con su vestido hecho jirones. Allí, con arañazos y heridas en su cuerpo, narró a los agentes como un desconocido la amenazó con un arma blanca y la guió hacia un lugar retirado cerca de Abetxuko donde la agredió sexualmente.

Con hechos como estos Ikusgune advierte que se está detectando una mayor hostilidad hacía el colectivo trans. «Estamos ante una escalada LGTBIfóbica de gravedad. Es más necesario que nunca redoblar esfuerzos para acabar con los discursos que son la antesala de la agresión» y recuerdan que estos «esconden un mensaje a todo el colectivo LGTBI e interpelan a toda la sociedad». Y en este sentido, animan a las víctimas a denunciar y llaman a todos los que presencien una agresión contra alguien por motivo de su identidad sexual a comunicarla.

El Ayuntamiento a su vez lanzaba un segundo comunicado en cinco días en el que, de nuevo, lamentaban que Vitoria vuelva a ser escenario de una agresión machista. «Nuestra más enérgica condena de la agresión, así como nuestro apoyo a la víctima. Ponemos a su disposición los recursos psicológicos, jurídicos, sanitarios, de protección que requiera».