Carriles en las traseras del colegio San Viator.

Padres de San Viator denuncian el «caos» del nuevo carril-bici

Censuran la pérdida de aparcamientos que ha generado el ya estrenado bidegorri y reclaman al Ayuntamiento que estudie alternativas

Daniel González

Martes, 26 de enero 2016, 00:48

«¿Vais a poner la foto en el museo Artium? Porque esto es una maravilla», ironiza un hombre a las puertas del colegio San Viator, señalando el nuevo carril bici habilitado en la zona y el área reservada a los peatones pintada en la calzada. Apenas faltan unos minutos para que su nieto salga de clase del popular centro escolar, y él aprovecha para mostrar su indignación por el diseño que deja un único carril de paso a los coches. «Es una mierda», asegura, ya sin ironía, mientras varios padres invaden el espacio de las bicicletas para poder recoger a sus hijos. Y quienes le rodean asienten con la cabeza, porque el sistema escogido por el Ayuntamiento vitoriano -similar al que ya generó una fuerte polémica en el primer tramo de la cercana calle Argentina- se ha ganado en sólo unos días el odio de todos los padres.

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La pérdida de uno de los carriles, que ellos usaban en las horas de entrada y salida de clase para aparcar en doble fila y dejar a sus hijos en el complejo educativo, ha traído el caos a esta calle. Bien lo sabe Montse, que no ha dudado en llegar media hora antes a la zona para asegurarse un hueco en la zona reservada para estancias máximas de 15 minutos, conocida como parking-exprés. «Tengo que venir ahora, si no es imposible aparcar con lo que han montado aquí», justifica esta madre. Y es que «sólo han dejado unas veinte plazas, y antes había espacio suficiente para bajar, dejar a los niños y marcharte, con venir cinco minutos antes lo tenías solucionado», reprocha.

Aparcar en la acera

El lunes pasado ella vivió en primera persona los problemas aparecidos ya en esa zona tan concurrida de estudiantes. «Es caótico, no queda más remedio que aparcar encima de la acera, o en el carril para peatones», explica la mujer. Algunos de los afectados hasta entran en la semirotonda que, por medio de pivotes, deja un amplio espacio para peatones. «Esto es una mala planificación urbanística, con elementos que no se explican Es una faena, porque en el colegio hay más de mil alumnos», recuerda. Ante esta situación, el colegio ha programado una reunión orientativa para, junto con usuarios del polideportivo de San Andrés y de Txagorritxu, y vecinos, ver qué se puede hacer. Y la asociación de padres y madres de San Viator ha hecho además un llamamiento a los afectados para que acudan hoy al Foro de Movilidad, que se celebra en el palacio Europa a partir de las 19.00 horas, para exponer su queja.

Montse va a ir allí para pedir a los políticos del Ayuntamiento de Vitoria «que vengan ellos a ver qué sucede, a ver si recapacitan», ya que está previsto que el modelo de la calle Argentina se traslade también a la calle San Viator. Y no es la única que lanza ese mensaje. Vanesa también insiste en que «es muy fácil rectificar y estudiar otras soluciones». No en vano, ella tiene que salir de casa «una hora antes» para lograr sitio, «y aun así no es fácil, nos han quitado muchas plazas y el parking más cercano lo compartimos con el colegio Luis Dorao, muy cercano a Sanvi. «Si llegas un cuarto de hora antes no aparcas», asegura, indignada. La situación ha obligado a que algunos padres se hagan cargo de compañeros de sus hijos hasta que llegan a recogerlo. «No entendemos por qué han hecho esto», critica.

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