Una labor de orfebre en mitad del Covid

Con restricciones en vigor, no ha sido cómodo, por ejemplo, acceder a organismos oficiales (sobre todo por cuestiones de aforo o por la escasez de citas previas), así como tampoco ha resultado sencillo realizar muchas de las entrevistas. Algunas se veían, una y otra vez, postergadas por problemas de agenda o por el miedo al virus, aunque siempre se intentaron concertar al aire libre.

A todo ello hay que añadir que las redacciones de EL CORREO y EL COMERCIO han trabajado con el personal presencial indispensable, desplazando el peso informativo al teletrabajo. En este contexto, la tecnología se convirtió en una gran aliada: las videoconferencias y los grupos de Whatsapp (se crearon hasta tres diferentes) fueron una constante y permitieron conectar personas que estaban en Asturias, Euskadi, Madrid o... Huelva, porque, por qué no decirlo, algunos redactores no han querido desconectar de este «apasionante» proyecto ni cuando se cogieron unos días de vacaciones.

Tras el proceso periodístico y de redacción del guion (algún capítulo se ha reescrito hasta 9 veces) llegó el turno de la sonorización y la grabación de la voz del narrador. Una tarea creativa que unió al actor Adolfo Fernández y al ingeniero de sonido Rodrigo Ortiz de Zárate. La labor en el estudio fue también ardua para recrear una atmósfera sonora tan asfixiante como única. Pero el proyecto no acababa aquí, dos directores de arte, el ilustrador Sr García y, de nuevo, los 6 periodistas, se involucraron en un desarrollo transmedia para darle una identidad web al podcast.