Salud destinará 177 millones este año a la lucha contra el covid

El consumo de material de protección se ha multiplicado de manera exponencial «y sin precedentes históricos», explica Salud en la memoria remitida sobre el balance del primer año de pandemia en Euskadi. Según los datos recogidos, las batas han pasado de un consumo semanal medio de 785 a uno de 24.352; los guantes de 1,3 millones a 2,5 millones; las mascarillas de 43.400 a 225.975 y las gafas de protección de 20 a 1.360. La compra de emergencia de material ha superado los 15 millones de euros.

La realización de pruebas PCR también ha supuesto un gasto extraordinario, además de un esfuerzo logístico que se mantiene. El personal de Osakidetza ha realizado, analizado y facilitado resultados de 209.871 pruebas de este tipo y test de anticuerpos hasta la fecha, según el balance remitido.

El año pasado, antes de que saltaran los primeros casos positivos de coronavirus en Euskadi, Salud desarrolló un plan de adquisición de equipos que se comenzó a implementar en el mes de febrero y que permitió ampliar el número de camas UCIs. El plan de contingencia contemplaba la adquisición del equipamiento propio de estas unidades, como respiradores, mesas de anestesia, bombas de infusión, camas UCI, ecógrafos, centrales de monitorización, etc.

Según figura en el balance de Salud, ese aprovisionamiento anticipado permitió a Euskadi ceder el 23 de marzo, ya en pleno impacto de la pandemia, 12 respiradores a La Rioja (7) y a Madrid (5), para ayudar a superar la situación de colapso en la que se encontraban estas comunidades.

El mercado de respiradores se intervino en marzo y de los 230 equipos comprometidos para ser suministrados a Osakidetza únicamente llegaron 55, lo que obligó a que, en el tramo más álgido de la crisis, tuviera que recabar de la red concertada la cesión de 25 respiradores y torres de anestesia.