Los mejores planes culturales para este fin de semana en Bizkaia

'Malvivir' nos lleva «de modo juguetón» a la «cara oscura» del Siglo de Oro, una época «turbulenta y fascinante» en opinión de Álvaro Tato y Yayo Cáceres, que la conocen bien. Dramaturgo y director, son especialistas en ir a la raíz y escenificar los clásicos de manera cercana y directa, en la veterana compañía Ron Lalá y ahora en Ay Teatro. A esta suma de talentos se han unido la actriz Marta Poveda, con experiencia en la Compañía Nacional de Teatro clásico, y Aitana Sánchez-Gijón. Ambas interpretan, con música en directo de Bruno Tambascio, a una decena de personajes que giran en torno a la figura de Elena de Paz, «mujer libre, rebelde, ladrona, ingeniosa, embustera y fugitiva que desafía todas las convenciones de su época y paga el precio de su libertad». Encarnan la literatura picaresca femenina del Barroco, con su reflexión sobre libertad y supervivencia, en un montaje que recupera fragmentos de obras como 'La hija de Celestina', 'La niña de los embustes' y 'La pícara Justina', junto a tres letrillas y un romance de Quevedo.

Conozco a gente que no ha podido olvidar 'Las guerras de nuestros antepasados' aunque ya han pasado más de 30 años de su estreno. Ver –y oír– a José Sacristán metido en la piel de Pacífico Pérez, el personaje creado por Miguel Delibes que cumple condena en un sanatorio penitenciario, fue una experiencia poderosa de las que alimentan el amor por el teatro. Mientras preparaba esa representación el actor tuvo «el privilegio» de conocer a Delibes «e incluso presumí de ser su amigo», recuerda. Esa antigua complicidad late en 'Señora de rojo sobre fondo gris', el monólogo que llega esta semana, con las entradas casi agotadas, al Campos Elíseos.

La adaptación realizada por José Sámano, el propio Sacristán e Inés Camiña es fiel a la confesión íntima del duelo y a una declaración de amor más allá de la muerte. Nicolás, el pintor que ha perdido la inspiración y las ganas de vivir tras la muerte de su esposa, expresa el dolor de Delibes por la ausencia de Ángeles Castro, su compañera de vida, fallecida a los 48 años. De la cercanía con el autor y de su propia experiencia de un vacío al que nadie escapa nace esta interpretación de José Sacristán, una cita imprescindible.

El teatro breve vuelve a hacerse grande en Pabellón 6 entre el 1 y el 24 de abril con el estreno de 16 piezas –once en castellano y cinco en euskera– a lo largo de cuatro semanas. Por primera vez, debido a las obras, habrá un único escenario, el principal, con sesiones los viernes y sábados por la tarde y los domingos también matinales. Se pueden adquirir bonos de 17 euros para ver las cuatro piezas del día o para dos por diez euros (estos últimos solo en taquilla el día de la función). Esta semana veremos 'Ángel con grandes alas de cadenas', de Markel Hernández, sobre el ingreso de Blas de Otero en un sanatorio mental en 1954; 'Begoña, Pepa y los demás' con Itziar Lazkano en el papel de una madre que reúne a sus hijos tras quedarse viuda; la creación colectiva 'Skuld. Lo que es necesario que ocurra' y 'Gaizki', de Iñaki Cid.

'La cazadora de mitos' es el primer proyecto que une a Jose Ibarrola –de larga trayectoria teatral como escenógrafo– con sus hijos Martín y Naiel. El primero, escritor, ha ideado una trama sobre la lucha entre la memoria y el olvido que se desarrolla en el mundo de los mitos, donde permanece el recuerdo de las personas que han dejado huella. Lo cuentan mediante la fusión de teatro, cine, animación y música «en igualdad de condiciones», de una forma que sorprenderá al público.

Es escena veremos a la protagonista, una antropóloga del Itsasmuseum interpretada por Leire López del Pueyo, y a un pianista, Naiel Ibarrola, que también es director artístico y autor de las composiciones musicales. La pantalla de cine es un personaje más de la obra, donde aparece un gran elenco de actores vascos con Javier Gurruchaga como narrador. Aunque han rodado en lugares como la biblioteca de Bidebarrieta, casi todo ocurre en el mundo fantástico dibujado por Naiel, mientras que el espacio escénico lleva el sello de Jose Ibarrola. Con dirección escénica de Marta Eguilior, el montaje rescata historias de la ciudad y promete momentos de emoción como el homenaje a los niños fallecidos en la avalancha del Teatro Circo del Ensanche.

Llega a Barakaldo el nuevo trabajo de la compañía gallega Chévere, Premio Nacional de Teatro en 2014, que combina humor con pensamiento crítico como ya demostró en 'Eroski Paraíso' y 'Curva España'. 'N.E.V.E.R.M.O.R.E.', estrenada en el Centro dramático Nacional, toma su título del grito indescifrable del cuervo del poema de Poe, que en su traducción al gallego alude a la plataforma ciudadana Nunca Máis. Con dramaturgia y dirección de Xron, se trata de una ficción con base documental que aborda la herida aún abierta que causó el desastre del 'Prestige' y la conecta con «catástrofes anunciadas como la pandemia actual o la crisis climática». Seis intérpretes (Manuel Cortés, Borja Fernández, Mónica García, Miguel de Lira, Patricia de Lorenzo y Arantza Villar) ofrecen testimonios reales de los habitantes de la zona más castigada por la marea negra y recrean la gestión fallida de la crisis.

La Pacheca Collective lleva a Durango la obra que hadesarrollado durante una residencia artística en La Fundición. 'Tarán-tran Transición' (Lluvia, grises y las 5.000 amantes del Rey)' combina crítica, humor, testimonios reales y recuerdos de infancia de Bea Insa y Ángel Mirou. Ambos firman la dramaturgia y centran su mirada en Euskadi. Abordan hechos imposibles de olvidar como el asesinato de la bilbaína Yolanda González, la matanza del 3 de marzo de 1976 en Vitoria y el levantamiento feminista a partir del caso de 'las 11 de Basauri'. Esta «revisión crítica y con algún irremediable tinte trágico» de un periodo histórico «de supuesto consenso general» es un espectáculo multidisciplinar con la actuación de la violonchelista Nerea Aizpurua y proyecciones con edición de vídeo en directo de Ángel Mirou.

Hay varios géneros en los que Haydn dejó catálogos inmensos. Tanto que esa hiperabundancia ha terminado por perjudicarle por lo que tiene de dispersión de la atención del aficionado. Si hablamos de sinfonías, las 106 que escribió son un récord nunca igualado por un compositor de primer nivel. Si nos detenemos en el piano, con las 62 sonatas pasa otro tanto. Y si nos vamos a los cuartetos de cuerda –por centrarnos solo en tres grandes géneros–, los 68 del catálogo son también una marca insólita.

La temporada de cámara de la BOS aborda en su programa del próximo lunes un cuarteto de cuerda de Haydn, el opus 20 Nº 2, más conocido por su título: 'El sol'. No es uno de los más conocidos, tampoco de los menos interpretados. En cualquier caso, se trata de una pieza que probablemente pocos aficionados bilbaínos habrán escuchado en vivo.

Menos aún serán los que hayan podido oír en una sala de conciertos –y me atrevería a decir que incluso en disco– el Noneto de Louise Farrenc, una compositora de la que la BOS interpretó la pasada semana su Sinfonía Nº 1.

Un día para los descubrimientos, por tanto. Que siempre es un motivo para ir a un concierto.

Es un tópico. Tras el estreno de 'Guillermo Tell', en 1829, Rossini se retiró de la vida musical para dedicarse a otras actividades, entre ellas una que le dio casi tanto nombre como la ópera: la gastronomía. Sin embargo, esa retirada no fue tal. Es cierto que no compuso más óperas, el género que le había dado fama y por el que todavía hoy se le conoce en todo el mundo. Pero siguió escribiendo en el papel pautado. Otras obras y a otro ritmo, pero hubo más.

Dos de esas obras están en el programa del Concierto de la ABAO: son el 'Stabat Mater' y 'Giovanna d'Arco'. La primera de ellas tiene una vinculación notable con España, puesto que fue fruto de un encargo y se estrenó en una primera versión en 1833 en el convento de San Felipe el Real de Madrid, que se levantaba junto a la Puerta del Sol y que hoy ya no existe. Esa versión no era enteramente de Rossini, quien tras varias vicisitudes a cuenta de la partitura, su propiedad y los derechos, completó el trabajo personalmente, para hacer una segunda y definitiva versión que se estrenó en 1842, esta vez en París.

Pese a su carácter religioso, la música no deja de ser un genuino Rossini, lo que le valió no pocas críticas. Es decir, la dramatización del episodio que se narra es de tal magnitud que bien parece un drama lírico. La obra está escrita para soprano, mezzosoprano, tenor y bajo, coro y orquesta.

La segunda obra del programa tiene el mismo carácter: estamos ante una cantata sobre la figura de Juana de Arco, pero de nuevo es casi como una ópera. La obra fue escrita en 1832 para contralto y piano. La cantante que estrenó la pieza fue Olympe Pélissier, quien catorce años más tarde se convertiría en esposa de Rossini, al enviudar este.

La pieza ha sido objeto de dos orquestaciones: la primera, obra de Salvatore Sciarrino, vio la luz en 1987; la segunda, de Marco Taralli, con un lenguaje mucho más moderno, es de 2011. Precisamente esta la estrenó Marianna Pizzolato, que participará en el concierto. Sin embargo, la versión escogida por la ABAO es la de Sciarrino.

Vuelve el Festival BLV–ART, que desde hace casi veinte años ya es el escaparate de los nuevos formatos de creación artística en diferentes espacios de Bilbao La Vieja. Se desarrollará entre el 1 y el 10 de abril, y con varios espectáculos de danza en su programa. Vayamos a este primer fin de semana para dar con el primer estreno absoluto: el sábado de los cuerpos –no solo de la mano– de Input, en el Museo de Reproducciones. 'Play' es un dúo sobre la relación entre dos cuerpos, dos masas que buscan relacionarse desde la escucha y el deseo que ambos comparten, la curiosidad de entender como movilizar el cuerpo del otro sin utilizar la fuerza. Es una conversación a partir de movimientos, de idas y venidas, de las imágenes que componen juntos y por separado.

El miércoles hay otro, esta vez en BilbaoArte, y lo curioso es que se trata de (casi) pequeños estrenos individuales, es decir, de apostar por hacer pases pensados para un solo espectador cada vez –los días 6, 7 y 8, en distintas franjas horarias-– 'Within', de DOOS Colectivo, es una propuesta de danza interactiva e inmersiva, la primera videodanza vasca para el metaverso, que lleva al público al interior de la mente de Eva Guerrero, alguien que crea desde el movimiento. Cada persona podrá ir escogiendo las secuencias, los sonidos, para conocer ese mundo creativo interior, cómo funciona el proceso creativo. El día 6 también habrá una presentación pública de este formato innovador (y esclarecedor). Hay más citas con la danza en el festival, lo mejor es echarle un ojo al programa.

Las imágenes de Ana Amado reflejan la renovación arquitectónica a mediados del siglo XX.

Hay exposiciones que funcionan como esas películas de bajo presupuesto y grandes cualidades que triunfan gracias al boca oreja y no por efecto de promociones masivas. 'Arquitecturas (re)visitadas' se merece la suerte del 'sleeper' por su calidad y sutileza. Las imágenes de Ana Amado proporcionan una mirada singular sobre el mundo urbano y rural sujetos al cambio, sobre los edificios pioneros del movimiento moderno en España y los poblados de colonización, dos realidades paralelas en el tiempo y aparentemente ajenas. La muestra se puede contemplar en la sala de exposiciones del Colegio Oficial de Arquitectos Vasco-Navarro.

La aproximación tiene una escala humana. Las fotografías de la autora gallega, también arquitecta, escapan de cualquier atisbo de grandilocuencia y nos proporcionan una visión fragmentaria de las construcciones, similar a la que obtendríamos si, como ella, nos acercáramos con curiosidad hasta aquellos lugares. En el blanco y negro de la época, recorremos el Cine Barceló, un emblema de Madrid, o el Hipódromo de la Zarzuela, y penetramos en el interior fascinante del IPCE.

La muestra cuenta con dos áreas de exhibición que ofrecen un sugerente itinerario por la España de mediados del siglo XX, la que recorre la autarquía y desemboca en la integración en Europa. La segunda parte está dedicada a los pueblos de colonización, fenómeno que se extendió al sur del país. El espectador se encontrará con la funcionalidad y sobria belleza de los pueblos de nueva planta diseñados por maestros de la talla de Alejandro de la Sota.

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