El Mirandés abona 1.800 euros a la Liga cada vez que General no está al 75% de ocupación

La patronal exige que la grada que se vea en el principal tiro de cámara debe estar cubierta en, al menos, un 75% de su aforo máximo. En este caso, es General. Cabe recordar que su capacidad alcanza las 3.200 personas, siempre a tenor de las cifras que se hicieron públicas en su día cuando se construyó esta tribuna lateral que sustituyó a la mítica grada de pie.

Esto quiere decir que tendría que estar ocupada por 2.400 personas cada partido para evitar que la firma que gestiona el campeonato no haga efectiva la sanción de 1.800 euros que impone a cada club que incumple esta norma. Si se tiene en cuenta que hay encuentros en los que la asistencia que presenta todo el estadio, juntando todas las gradas, no llega a esas cifras (salvo los que suscitan más interés, derbis y otros con presencia de hinchas visitantes), el Mirandés debe abonar la correspondiente multa.

De ahí que se hayan regalado entradas a clubes (al Casco Viejo habitualmente, para el último partido contra la Ponferradina dieron 120) incluso a centros educativos al objeto de que el graderío de más reciente construcción reúna al mayor número de aficionados para arropar, por un lado, al equipo y, de paso, para evitar el castigo económico.

Lo que se exige es que sea la grada de General la más ocupada, no el fondo norte, habitualmente vacío a no ser por el desplazamiento que realizan algunas aficiones.

Desde el Mirandés no se ha hecho público cuántas veces ha tenido que abonar esta multa (son datos que no se facilitan), si bien en tres de los once encuentros que ha acogido el Municipal desde que la competición arrancó el pasado mes de agosto no se ha llegado a esas 2.400 personas en el conjunto del estadio, en todos sus graderíos.

Así, en el choque ante el Tenerife, con motivo de la disputa de la jornada decimocuarta, solo se contabilizaron 2.249. Menos aún fueron a ver el duelo contra el Cartagena, en la decimosexta: 1.902. Y en la 18, con el Albacete como adversario, se dieron cita, en total, 2.398.

Estos datos ponen de manifiesto que la asistencia a Anduva ha ido disminuyendo conforme avanzaban las jornadas: los horarios, el empeoramiento de la climatología con la llegada de los días invernales (este año, no es demasiado acusado) y la trayectoria errante de un equipo que hasta las últimas semanas no ha enderezado el rumbo son factores que también contribuyen a explicar este cierto desapego en las últimas fechas.

Hasta ahora se han reunido en el recinto rojillo 29.794 personas en los once partidos del primer acto de campeonato. Arrojan una media de 2.700 por encuentro disputado gracias, principalmente, a los duelos de las primeras jornadas de la temporada.

El que registró una mayor afluencia fue, precisamente, el primero ante el Sporting: 3.627 espectadores, con un millar de hinchas visitantes. Seguido por la cita contra el Zaragoza: 3.528. También con una similar presencia de aficionados foráneos.

Son los únicos partidos a los que se llegó a los tres millares de personas. Son los que han permitido que haya subido ligeramente la media.