Tipos de criptomonedas: ¿son realmente monedas o valores bursátiles?

Su rentabilidad depende de la diferencia de valor que tenga en el momento de la compra, en relación a la que tenga en el momento de la venta, como cualquier inversión que se haga en moneda o valores bursátiles. No se percibe, por supuesto, ningún tipo de dividendo.

Como cualquier mercado, ya sea de naranjas, acciones o en este caso, monedas, el precio se origina por el juego entre oferta y demanda. Por un lado, la demanda es irregular ya que no sigue ninguna regla más allá del comportamiento de los inversores. Por otro lado, la oferta depende del número de unidades producidas.

La inflación producida por los bancos centrales no afecta a estas criptomonedas. Y es que cada año, o cuando por motivos macroeconómicos lo necesitan, los estados generan más cantidad – o menos en algunos casos-    de moneda, para devaluarla y así subir los precios ligeramente. Esto se conoce como inflación. Pues bien, esto no pasa en el mercado de criptomonedas. Tal y como comenta Daniel Lacalle: «La clave es que la masa monetaria total no aumenta, no se emite más dinero del que se ha creado. En las monedas fiduciarias a la masa monetaria existente se le añade más. El euro que recibiste hace diez años se va diluyendo; la inflación es una cuestión monetaria, los precios suben. Lo que no genera el Bitcoin es el proceso inflacionario que sí generan las monedas fiduciarias, pero la gente no identifica en primera instancia que cuando suben los precios, lo que pasa es que baja el poder adquisitivo de la moneda».

A continuación se explicarán los tipos de criptomonedas, cómo se generan, con base en qué criterios y quién lo realiza:

No lo genera ninguna autoridad central ni tiene la cobertura de ningún estado u organización como la UE, como pasa en las monedas convencionales. Su precio, al igual que el resto de criptomonedas, se fija según las unidades que se generen y este número depende de los criterios que se explican a continuación.

Actualmente existen 18 millones de unidades de Bitcoin y el sistema está diseñado para que se detenga al llegar a los 21 millones, se calcula que allá por el año 2140. Pero, ¿cuál es el criterio para generar más o menos unidades?  Existe la figura llamada «recompensa» . Esta es la única forma por la que se inyectan nuevas unidades al mercado y son ofrecidas a los mineros. El criterio para recompensar en mayor o menor medida, depende de las complejidades del sistema Blockchain.

Al ser una moneda de transacciones lentas las comisiones son elevadas. Estas se pagan cuando existen largas listas de validación. Cuanta más comisión se paga más puestos se adelanta en la lista de transacciones pendientes. Ésta criptomoneda, además de ser    la más famosa, es la que su valor oscila de forma más acentuada.

Se creó en el año 2017 a raíz de una bifurcación con Bitcóin. El objetivo de esta moneda es servir como método de pago en vez de como producto de inversión. Los fundadores afirmaban que Bitcoin    se había convertido en una moneda de transacción muy lenta – con comisiones elevadas- y que por ello se utilizaba más como método de inversión. En estos momentos su precio asciende a más de 500 dólares, una cantidad notablemente inferior a los 46.000 del Bitcóin normal.

Esta es la segunda criptomoneda más utilizada en el mercado y la subcampeona en cuento a valor con 1.800 euros de precio por unidad. Se creó en el año 2015 y su funcionamiento es muy similar al Bitcóin: utiliza el sistema «blockchain», «mineros» y «recompensas». La única diferencia es que las transacciones son más lentas y las comisiones más altas.

Este más que una criptomoneda es un grupo de las mismas, caracterizadas por unir su valor al de una moneda común, como puede ser el dólar o el euro. Existen multitud de Stablecoins que «atan» su valor al de otra moneda y de esta forma se evitan los riesgos de inversión y los problemas que se atribuyen al pago con criptomonedas.

Su valor suele rondar el medio dólar. Es una de las criptomonedas más centralizadas al ser los servidores de Ripple los encargados de generar divisas. No opera mediante la tecnología «blockchain». Se caracteriza por ser rápido en la validación de transacciones y comisiones bajas.

Rondando los 300 euros de cotización es la tercera criptomoneda en utilización y valor. Entre sus principales propuestas, Litecoin busca ser una criptomoneda más rápida con comisiones más económicas y una alternativa eficiente para pagos.