Los supermercados vascos hacen acopio para evitar problemas

Eroski ha reforzado hasta en un 20% la capacidad productiva de los cuatro centros logísticos de Elorrio, Amorebieta, Júndiz y Ciempozuelos, desde los que atiende las 300 tiendas con las que cuenta en el País Vasco y Navarra. Portavoces de la cooperativa señalaron que «nuestro trabajo es anticiparnos a las distintas eventualidades y por eso hemos procedido a un llenado de nuestras plataformas», además de reforzar la contratación y los turnos de fin de semana.

Fuentes del sector agregaron que, como ocurriera en el comienzo del coronavirus, se ha detectado un incremento de ventas, especialmente en productos no perecederos o que están relacionados con el cereal cultivado en Ucrania. Es el caso de harina, pasta, aceite de girasol y conservas.

El presidente de Mercadona, Juan Roig, que presentó ayer los resultados del grupo, también hizo referencia a la garantía de suministro y achacó estos episodios a movimientos irreflexivos de los consumidores, a los que hizo «un llamamiento a que no hagan acopio». Roig insistió en que «vamos a garantizar el abastecimiento, igual que el resto del sector y toda la cadena agroalimentaria».

Otra de las marcas vascas de alimentación, Uvesco, la de Supermercados BM, ha detectado también un incremento de ventas en determinados productos que responden «a las prácticas de acopio» de algunos clientes. La compañía comandada por la familia Fernández de Barrena hizo un especial llamamiento a la tranquilidad y señaló que el funcionamiento en todas sus plantas logísticas respalda «estos repuntes de consumo».

Lidl se apoya en su centro logístico de Nanclares de la Oca (Álava) desde el que da soporte a más de 90 tiendas en Euskadi. Una superficie de 53.000 metros cuadrados que puso en funcionamiento el pasado año y que trabaja «a pleno rendimiento» para abastecer también a sus establecimientos de Cantabria, Castilla y León, La Rioja y Navarra.

Grandes operadores nacionales confirmaron asimismo que los proveedores de la cadena alimentaria han hecho acopio de reservas en los días previos al inicio del conflicto bélico para aguantar el crecimiento del consumo. Añadieron que se están buscando alternativas para el cereal y sus derivados provenientes de Ucrania.