El Gobierno vasco eleva el endeudamiento un 81% en un presupuesto récord que apuesta por Vivienda, Universidades y Seguridad

El mayor salto, por encima del 6%, se registra en los departamentos de Vivienda, Seguridad y Ciencia y Universidades. Las Cuentas del Ejecutivo contemplan un nuevo techo histórico de gasto de 16.378 millones, un 4,1% más que el pasado año. A esa cantidad se añadirán 935 millones, una aportación extraordinaria a costa de deuda para afrontar inversiones en la industria vasca. De este modo, la autorización total del gasto de las Cuentas del Ejecutivo será aún mayor alcanzando los 17.313 millones.

Así las cosas, en 2026, el esfuerzo inversor se mantiene con un recurso a deuda de 2.324 millones. Es un 81% más que el que recogía el proyecto presupuestario del año pasado y se aplica gracias al acuerdo alcanzado entre los Gobiernos central y vasco en la comisión mixta del Concierto este año. Euskadi, debido a su buena situación financiera (una de las deudas públicas más baja de las autonomías), podrá endeudarse para financiarse. El objetivo es cerrar con una deuda pública el próximo año del 11,9% del PIB y un total de 12.255 millones.

En esa financiación destacan los 935 millones que irán destinados al plan de inversiones surgido de la Alianza Financiera Vasca. Una cantidad que dará continuidad a los mil millones activados este año para operaciones estratégicas de la industria vasca, como la de Talgo. Además, el capítulo de inversiones escala hasta los 1.730 millones, un 12,4% más que el año pasado y de los que 723 irán para I+D, un 6,6%.

El consejero de Hacienda, Nöel d'Anjou, ha explicado que el Presupuesto contempla un escenario de «incertidumbre», pero el que se prevé un crecimiento del 1,9% y la creación de 11.000 empleos. Para los ingresos, además, de los 2.324 millones de endeudamiento, el Ejecutivo contará con los 14.143 provenientes de la recaudación de las diputaciones forales. Donde se nota un descenso es en la inyección de dinero del Gobierno central. Los fondos europeos que gestionan las autonomías ya se han agotado. Una tendencia que se empezó a acusar este año, pero para el que viene se queda en unos testimoniales 82 millones, que son restos de lo ya recibido. También caen un 21%, hasta los 764 millones, las partidas de las encomiendas de gestión por la 'Y vasca' o el Ingreso Mínimo Vital.

El grueso de las Cuentas se sigue concentrando en Salud, con 5.327 millones, seguida de Educación, con 3.346 millones. Solo esas dos carteras aglutinan el 52% del gasto público previsto para el año que viene. El proyecto se registrará el día 30 de octubre en el Parlamento, con la previsión de que sea ratificado definitivamente en el pleno del día 23 de diciembre.

El departamento de Vivienda dispondrá de 482 millones. Es el que más crece, un 6,8%, y evidencia el impulso que el Ejecutivo quiere dar a esta cartera en un escenario en el que el encarecimiento inmobiliario dificulta el acceso a los hogares. Se dotará con 20 millones el Fondo Social de la Vivienda, la primera aportación a esta herramienta que se enmarca en la Alianza Financiera Vasca. Además, se contempla la activación de más de 2.000 viviendas: 700 de alquiler asequible, 788 protegidas y 602 que adquirirá Alokabide.

El tercer área del Ejecutivo con más gasto es la de Economía, Trabajo y Empleo. El departamento del vicelehendakari Mikel Torres gestionará 1.266 millones, un 3,3% más y una evolución por debajo del crecimiento presupuestario. De esos recursos, 516 irán a formación e inclusión laboral, mientras que 688 se dirigirán a prestaciones.

De esas prestaciones, las Cuentas contemplan una subida del 2,5% para la cuantía de la RGI, una cantidad asociada al IPC que también se trasladará a los funcionarios en la misma proporción. Aunque, eso sí, a la espera de la decisión del Congreso de los Diputados, ya que la retribución de los trabajadores de la función pública es una cuestión que compete al Estado.

El Departamento de Seguridad es uno de los tres que más crece, lo hace un 6,4% y hasta los 850 millones para seguir renovando el parque móvil de la Ertzaintza y reforzar el área dedicada a los ciberdelitos.

El gasto en Educación se eleva un 3% hasta los 3.346,5 millones de euros. Son 98,1 millones más que en 2025, de los cuales la mayor parte (80 millones) se destina a reforzar los gastos de personal.

Con la emisión de deuda, el Gobierno seguirá reforzando los fondos con los que diseña las operaciones de participación y respaldo en empresas estratégicas. Así, Finkatuz, destinado al arraigo, recibirá 350 millones alcanzando una liquidez de 550. La otra herramienta con la que cuenta el Ejecutivo es la de Indartuz, que dispondrá de 400 millones gracias a la aportación presupuestaria el próximo año de 65 millones.

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