El adelanto electoral vuelve a colocar en el alero la entrada de Indra en la vasca ITP

El Gobierno se ha empleado a fondo para intentar materializar esa entrada de Indra -de la que controla el 28% del capital- en ITP desde el mismo momento en que Rolls Royce puso a la venta su participación en la compañía vasca, en agosto de 2020. Desde ese momento y hasta el pasado mes de septiembre, cuando Rolls dejó la empresa en manos del fondo norteamericano Bain -también ha entrado el Gobierno vasco con un 6% y JB Capitals- el Ejecutivo ha presionado para que Indra se convierta en el socio español de referencia de ITP.

Hace apenas unos días el Gabinete de Sánchez consiguió dar el golpe de mano definitivo en Indra -o al menos eso parecía- para vencer las numerosas resistencias que había encontrado en la definición estratégica de la compañía. El consejero delegado y primer ejecutivo, Ignacio Mataix, presentó su renuncia al cargo y fue sustituido por José Vicente De los Mozos, exdirectivo de Renault y presidente de Ifema. Mataix se había opuesto a la compra de acciones de ITP -empresa que conoce a la perfección y de la que también fue primer ejecutivo durante 14 años-, al considerar que el precio era excesivo. Su relevo era, aparentemente, el último escollo para poder avanzar en la compra, tras haber forzado además la remodelación del consejo de administración de Indra.