La larga espera de los frontones Beti Jai

Han pasado más de cinco meses desde aquella declaración de intenciones y sólo los aficionados, los clubes y la federación alavesa han disfrutado de estas magníficas instalaciones para sus entrenamientos, partidos y campeonatos. En este tiempo, y a pesar de la pandemia y de las estrictas normas sanitarias, han reabierto sus puertas, que no sus gradas, frontones emblemáticos como el Astelena de Eibar, el Atano III de San Sebastián, Beotibar de Tolosa, Labrit de Pamplona, Adarraga de Logroño y Bizkaia de Bilbao. En todos ellos se han programado partidos de la Liga de Empresas, que engloba a los profesionales de Aspe y Baiko. Sin embargo, el Ogueta sigue a la espera.

Tanto los empresarios como el Ayuntamiento de Vitoria han mostrado su «buena disposición» a que las renovadas instalaciones del Beti Jai acojan partidos de primer nivel, pero no terminan de programarse encuentros. Según las fuentes municipales consultadas, «no existe ningún problema para la organización de partidos o festivales de pelota en Beti Jai», y recuerdan que las empresas del sector contactaron con el Ayuntamiento de Vitoria para conocer la disponibilidad de los frontones «por última vez en otoño», momento en el que las obras llegaban a su fase final.

«Desde entonces, las empresas no han vuelto a contactar» con la concejala de Deporte y Salud, Livia López, aseguran las fuentes, al tiempo que se muestran abiertos a «la organización de partidos o festivales, siempre que se ajusten a las restricciones sanitarias en vigor».

Fernando Vidarte, gerente y dueño de la promotora de Aspe, por su parte, aseguró a este periódico que la intención es que el Ogueta vuelva a la actividad profesional «en el momento en el que el Gobierno vasco permita el acceso de un público regulado». Sin embargo, este requisito, el de la presencia de aficionados en las gradas, no ha sido necesario para llevar partidos a los seis frontones mencionados de Bizkaia, Gipuzkoa, Navarra y La Rioja. Pero el hecho es que el Ogueta sigue en blanco.

Lejos quedan los años en los que el Ogueta albergaba partidos profesionales a lo largo del año y que la Feria de La Blanca era una de las citas de referencia cada verano. La feria vitoriana fue a menos hasta reducirse a un único festival. En 2019 sólo se disputaron tres partidos una vez que Ayuntamiento y las empresas llegaron a acuerdo apenas una docena de días del inicio de las fiestas patronales.

Ese mismo año fue el último en el que el Ogueta albergó partidos a lo largo del año. Organizado por la Federación Alavesa se programó un encuentro de la Liga de Empresas el 10 de febrero, coincidiendo con la simbólica fecha del 40 aniversario del frontón vitoriano, inaugurado el 9 de febrero de 1979. El duelo «de alto calado» del Parejas con Olaizola II-Albisu contra Artola-Mariezkurrena II, fue el último en el que la entidad federativa participó. «A partir de ese momento las empresas deciden sacarnos de la ecuación, del tripartito que formábamos el Ayuntamiento, Federación y empresas para organizar los eventos. Los empresarios deciden que no quieren interlocutores, nos excluyen y se acaban los partidos», resume el presidente de la Federación Alavesa, Iker Gereta. «Salvaron in extremis el campeonato de la Virgen Blanca, con sólo tres festivales y muy reducido si se compara con los cuatro o cinco que se hacían previamente».

Durante años, informa Gereta, la Federación contrataba además el Festival del día del Blusa y la Neska, pero «en 2019 ya no se celebró, porque era un festival que nosotros lo contratábamos aparte», aunque también reconoce las dificultades creadas con el inicio de los trabajos de reforma. «A finales de agosto comenzaron las obras y hasta este noviembre no ha estado disponible».

A pesar de que la Liga de Empresas juega con regularidad desde otoño, el Ogueta sigue sin acoger partidos. «Las empresas nos vetaron, rompieron el acuerdo verbal que había para organizar festivales en Vitoria, como veníamos haciendo desde la época en la que Fernando Palacios estaba de presidente en el Federación. Fue él quien consiguió aquel acuerdo y así veníamos celebrando festivales hasta que por parte de la empresas se cortó. Nos querían fuera y fuera estamos», resume.

La Federación destaca su activo papel en los festivales de pelota hasta que llegó el veto empresarial en 2019. «Hacíamos de todo, desde vender entradas, hasta animar a las escuelas y clubes o contratar la ambulancia. Lo que fuera para que los eventos saliesen adelante y fueran más exitosos. No es el fin de la Federación realizar eventos profesionales, pero nosotros heredamos el acuerdo y lo seguimos haciendo y cumpliendo», destaca Iker Gereta, que en su quinto año en la presidencia de la Federación lamenta que no haya festivales que hagan honor al nombre de los frontones Beti Jai.