Coral Bistuer, taekwondista de oro olímpico pese a la dislexia

Final de los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992. En el tatami, el entrenador da instrucciones a la madrileña Coral Bistuer, que por aquel entonces tenía 25 años. «Es muy importante que cuando ella tenga la pierna derecha detrás....», le indica su preparador. «¿Pero cuál es su derecha? Porque yo soy disléxica y nunca he sabido cuál es la derecha y la izquierda del otro», le responde la taekwondista. «¿Pero no has tenido otro momento para decirme que eras disléxica? Su pierna derecha es la que tiene la marquita de Adidas», le señaló él. Esta es sólo una de las numerosas dificultades a las que esta campeona, una de las mejores deportistas españolas de los años noventa y actual directora general de Deportes de la Comunidad de Madrid, tuvo que enfrentarse durante su carrera.

¿Cómo se puede ganar en taekwondo sin distinguir la izquierda de la derecha? Generalmente, Bistuer «pegaba y ya está». La madrileña comenzó a practicar este deporte a los 15 años y en apenas un año había ganado su primera medalla de bronce en el campeonato de España de 1980. Después llegarían nueve victorias como Campeona de España, cinco en los Europeos, e incluso dos victorias mundiales. La deportista también ha recibido galardones como el Premio Reina Sofía a la mejor deportista de España, la Medalla de Oro de la Real Orden del Mérito Deportivo del Consejo Superior de Deportes, que este año recaerá en Laia Palau, o el premio Siete Estrellas de la Comunidad de Madrid. Todo ello tras una infancia difícil en la que fue «ridiculizada cada dos por tres».

«Aunque seas muy líder, en el momento en que muestras tu flaqueza la gente se ríe», relató Bistuer durante una entrevista. Sus dificultades en la lectura le hacían cambiar palabras, olvidar la puntuación o leer despacio, y tampoco recibió el apoyo de sus profesores, que le reprochaban «leer como un niño de tres» a los 14 años. La campeona no ha ocultado lo que le ocurrió para crear mayor concienciación sobre la dislexia, trastorno que también padece su hijo Rodrigo. Eso sí, no fue consciente de lo que le pasaba hasta pasados los 30 años.

Bistuer, directora general de Deportes de la Comunidad de Madrid, también fue presidenta de la Asociación de Deportistas contra la Droga y celebra que el acceso de las niñas al deporte sea cada vez más habitual. «Cuando nosotras empezábamos no teníamos a nadie como referente. Teníamos que fijarnos en los hombres que triunfaban. Por eso tenemos que reivindicar que somos iguales»; afirmó en una entrega de premios en la que también defendió los deportes minoritarios o, como ella los llama, emergentes.

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