El armario de... la presentadora Ane Ibarzabal: «Creo que en la sencillez está la elegancia»

Ane Ibarzabal (Durango, 1982) todavía está 'aterrizando' en Euskadi. La presentadora vizcaína, que comenzó su carrera televisiva en CNN+ y ha sido la cara visible de 'Noticias Cuatro' e 'Informativos Telecinco', llevaba más de un lustro asentada en Madrid. «Tenía mi vida allí, mi trabajo, mis amigos, mis cursos de escritura, mi gimnasio…», reconoce. Una etapa que tocó a su fin cuando EiTB le ofreció presentar 'Nos echamos a la calle' junto a Aitor Albizua. Un programa que se emite de lunes a viernes a partir de las 17.30 horas y que tiene como objetivo conversar con la audiencia sobre temas de actualidad en tiempo real. Desde hace dos meses, la vida de la periodista es «un caos». Un trajín de idas y venidas a Madrid, a Donosti, ciudad en la que se graba el 'magazine' y en la que ahora reside, y a Durango, donde vive su ama. «Muchas veces, cuando me despierto, me pregunto: '¿dónde estoy?, ¿aquí o allá?'. Al principio, me quedaba en casa de mi madre, pero ahora he cogido una casita cerca del trabajo. La vuelta se me hacía eterna. Es una hora por la autopista y si llueve es horroroso», cuenta.

Se autodefine como una mujer «trabajadora, perfeccionista, romántica y dramática». «Soy una tía súper feliz, pero me gusta removerme en la tristeza», confiesa entre risas. Admira la elegancia de su madre -«muy pesada con la ropa»-, quien siempre les ha transmitido a ella y a su hermana mayor su sensibilidad por la moda. «Cuando estaba trabajando en Telecinco me solían decir: '¿por qué no haces algo relacionado?'», recuerda. Pero ella prefiere dedicarse a comunicar, que es lo suyo. De hecho, tampoco le gusta exhibirse en las redes sociales. Será de las pocas presentadoras que tienen su perfil de Instagram privado, reservado solo para los suyos. «Soy pudorosa y me da vergüenza compartir fotos mías. Además, me carga la gente que sube imágenes todo el rato, porque no es real», asegura. Sus únicos 'selfies' (algunos acompañan a esta entrevista) se los hizo cuando vivía en Madrid y con el objetivo de mandárselos a su madre. «Siempre nos ha orientado cuando nos íbamos de tiendas. Se los enviaba para que me dijera cómo me veía, y también le pedía opinión cuando me compraba algo», recuerda.

Nunca la veremos con «colorines», estampados o estridencias, «porque en la sencillez está la elegancia». Eso sí, la verán presentando el programa de lunes a viernes con trajes y americanas «con las mangas siempre remangadas»: «es una manía, lo hago con todo: con los jerséis, las camisas...», bromea. Su estilo formal en la televisión contrasta con su manera de vestir cuando se apagan los focos. «Voy en zapatillas a todos los lados», admite. Tiene algunos bolsos buenos -«están trillados de usarlos tanto»-, de Gucci, Louis Vuitton, Prada o Michael Kors, porque, en su opinión, «levantan cualquier look». Eso sí, nunca se gastaría «un dineral» en ropa: «En los 'showrooms' de Madrid encuentro piezas de firma con súper descuento».

Hoy, en Bizkaia Dmoda, Ane Ibarzabal nos abre las puertas de su armario.

- Con tanto viaje, ¿cómo lo haces con la ropa?

- Últimamente, voy con una maleta para arriba y para abajo. Ahora mismo no tengo un armario como tal. Lo de verano está en mi casa de Madrid, algunas cosas en Donosti y otras en Durango. Voy yendo y trayendo. Este puente he cogido de Madrid los abrigos y las botas de lluvia.

- ¿Qué prendas no pueden faltar en tu maleta?

- Un pantalón vaquero y unas zapatillas Converse. Voy con ellas a todos los lados.

- Qué tienes en tus casas, ¿armarios o vestidores?

- Armarios, porque vivo en casas de alquiler. El mundo de la tele es muy inestable, un día estás aquí y al siguiente allí. Cuando me estabilice, me gustaría comprarme un piso y tener un vestidor. Las veces que he estado mirando casas, siempre he imaginado dónde y cómo lo pondría. Ese día llegará.

- ¿Cómo los tienes organizados?

Según el tipo de prenda: los abrigos por un lado, las camisas por otro. Los zapatos también tienen su espacio y los bolsos están en un cajón con sus cajas. No coloco la ropa por colores, solo las camisetas blancas y las negras. Soy muy ordenada, pero sin llegar a ser obsesiva.

- ¿Piensas tus looks con anterioridad o improvisas?

Depende. Si tengo una cena o un evento concreto, me gusta pensarlos antes. Miro el tiempo que va a hacer, si tengo que llevar tacones… En mi día a día no, los elijo cuando me levanto. Entre semana, voy al trabajo con ropa de batalla porque luego en la tele me visten las estilistas.

- ¿Cómo defines tu estilo?

- 'Casual'. De lunes a viernes intento llevar ropa cómoda y práctica.

- ¿Cambia mucho en la tele?

- Sí. En el programa voy mucho con chaqueta, trajes y tacones. No tiene nada que ver.

- Y siempre con la manga de la chaqueta remangada, ¿por qué?

- ¡Siempre! Es una manía, lo hago con todo: con los jerséis, las camisas... No me gustan las mangas largas. De hecho, si las mangas cubren las manos de alguien, me pongo nerviosa y me entran ganas de hacerles ¡'raca', para arriba!

- ¿Cuál es tu estilismo comodín?

- Un jersey, un pantalón vaquero o negro, Converse y una gabardina o un abrigo, todo depende del frío que haga.

- ¿Cuál es tu accesorio fundamental?

- Soy una amante de los bolsos, me encantan. Tengo una colección de más de 10. En mi día a día, uso uno grande de tela porque llevo un montón de cosas, pero luego tengo algunos especiales, de Gucci, Louis Vuitton, Prada o Michael Kors. Yo siempre digo que puedes vestir con ropa sencilla, pero un buen bolso es capaz de levantar cualquier look. No tendré nada en la vida, pero si en algún momento dado necesito dinero, los podré vender. Eso sí, están trillados porque los uso mucho. No los tengo para que luzcan el armario.

-¿Qué me dices de los pendientes?

- Me gustan los grandes. Además, combino algunos pequeñitos en los 'piercings' que tengo en las orejas. Durante la semana no uso porque no voy a estar poniéndomelos y quitándolos para la tele. Ahí no me gusta llevar pendientes. Las estilistas me preguntan a ver si quiero, pero les digo que no. Soy un poco maniática, si ya llevo un traje y un tacón importante, ya está. Nunca me verás recargada con bolso, pendientes, collares... ¡Con todo no!

- ¿Cuál es tu prenda más atrevida?

- Un body de Alexander Wang súper bonito que me compré para unos premios. Tiene una goma negra y toda la espalda descubierta. Luego tengo algún vestido bueno... pero no me verás enseñando mucho. Soy bastante sencilla.

- ¿Hay espacio para el color en tu armario?

- No. Uso grises, beiges y blancos. Tampoco me verás mucho con estampados.

- ¿Qué tiene que tener una prenda para que te la lleves a casa?

- Que tenga un tacto agradable y que me siente como un guante. A mi edad ya sabes por dónde tirar.

- ¿Cuál ha sido tu última adquisición?

- Un anillo de 'Aristocrazy' dorado y gigante para llevar en el dedo índice. ¡Me gusta mucho! Y de ropa... un pantalón beige con pata ancha y cintura alta. Me lo compré en la tienda 'Mum' de Bilbao.

- ¿Prefieres ir a la tienda o comprar por Internet?

- Me encanta ir de compras, pasear, mirar, 'remirar', probarme, si tengo dudas dar una vuelta y luego volver. ¡Soy muy pesada! Pienso con qué me lo puedo poner y si me encaja. No me gusta comprar por Internet, salvo que sea algo puntual que no pueda encontrar en las tiendas. Por ejemplo, unas zapatillas de Chiara Ferragni.

- Tu prenda perfecta para no pasar frío es...

- Un abrigo largo beige que me compré en la tienda Inarkadia de Bilbao. Es de estos clásicos de siempre. En Madrid, tiraba más de este tipo de prenda porque no llovía tanto. Pero ahora que he vuelto al norte necesito comprarme un buen plumas.

- ¿Qué no te pondrías nunca?

- Un zapato blanco de charol. ¡Me parece una horterada!

- ¿Cuál es la mayor ganga que has adquirido?

- ¡Muchas! Si puedo comprar las cosas de firma en Madrid mejor. En los 'showrooms' te salen por la cuarta parte. Una vez me compré unos zapatos de Aquazzura súper baratos. ¡Valían una pasta! No me gastaría un dineral en ropa.

- ¿Cuál es la pieza más especial de tu armario?

- Una pulsera de oro que siempre llevaba mi madre. No se la podía sacar, así que la partió, le puso un cierre y me la dio. La usé mucho tiempo, pero me daba miedo perderla. Ahora la tengo guardada como oro en paño en mi armario. Para mí es muy especial porque en esa pulsera veo a mi madre.

- ¿Tienes prendas de tu juventud?

- No. Como voy con la maleta para arriba y para abajo, me deshago de todas las cosas que no me gustan, salvo de las buenas. Vendo ropa en 'Vinted', la regalo... solo guardo lo necesario. También le doy mucha a mi hermana.

- ¿Os 'robáis' ropa?

- Hacemos intercambio. Cada vez que venía de Madrid le traía lo que no usaba y ella me daba las cosas buenas que no utilizaba.

- ¿Ha cambiado tu estilo con los años?

- Me voy adaptando a las tendencias, pero diría que es el mismo. Me puedo poner unas botas 'cowboy', pero por arriba voy básica. Creo que en la sencillez está la elegancia.

- Nos ha quedado claro que prefieres las zapatillas que los tacones, pero ¿los aguantas?

- Sí, de hecho en el trabajo estoy casi todo el rato subida a unos tacones. Eso sí, ando con ellos fatal.

- ¿Eres supersticiosa con la ropa?

- Mucho. He llegado a usar algo muy poco porque el día que me lo puse me pasó algo que no quería. Mi madre me suele repetir: '¡Quita esas manías, por favor!'.

- Tu pelo es una de tus señas de identidad, ¿una melena corta es más estilosa?

- Sí, creo que es diferente y te da más personalidad que el pelo clásico, largo y con raya en medio, que a mí personalmente me queda fatal. Pero no te voy a mentir, a veces me gustaría poder hacerme moños, trenzas y coletas.

- Por último, ¿a qué rostro conocido le cambiarías el armario?

- A Hailey Bieber, me gusta el estilo de esa chica. También a Anine Bing, a Sienna Miller y a todas las nórdicas que van ideales con un vaquero, una camisa y unas zapatillas.

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