El PIN más rojiblanco levanta el telón en el BEC

Ni el encendido del alumbrado, ni los anuncios de turrones o juguetes. Para muchas familias vizcaínas la Navidad comienza en el BEC. Lo hace con el PIN, la instalación infantil de la feria de muestras de Ansio, en Barakaldo, que ha abierto este miércoles las puertas de su edición número 55. Hasta el 5 de enero, los pabellones 3 y 5 apostarán por la diversión centrada en valores como la sostenibilidad, la familia, la solidaridad, la igualdad y una vida sana.

A la familia habitual se le han sumado este año nuevos nombres como el de la Fundación Athletic Club. Su director, Jon Vázquez Eguskiza, ha visitado el stand habilitado con un pequeño campo de fútbol, llamado 'la bombonera', pinta caras, un futbolín humano y unos hinchables, entre otros atractivos. «Este es un lugar muy querido por todos los vizcaínos y nuestra intención es seguir estando presentes en el futuro con todos los niños y con toda la sociedad», ha apuntado el dirigente rojiblanco.

El stand de la entidad bilbaína ha contado con la presencia de dos leones de la liga Genuine, Aitor Alberdi y Javi Núñez. Debido a su juventud, ellos recordaban perfectamente su paso por el PIN como usuarios. «Si los chavales se ponen a jugar al fútbol igual nos unimos a ellos», han asegurado los jugadores. También se ha acercado el diputado general Unai Rementeria, quien ha compartido junto al presidente del Athletic Club, Aitor Elizegi, el arranque de las actividades en la infraestructura vizcaína.

Mientras los menores hacían lo suyo, los padres en el PIN cargaban con las mochilas y acompañaban en las colas. Algunos aprovechaban las actividades más largas para acercarse a disfrutar de la hostelería. «A veces es un poco estresante por las colas y todo eso, pero ellos se lo pasan muy bien», han señalado Nagore González y Marta Martínez, madre y tía de varios pequeños. A su alrededor Oier, Izaro, Naroa, Jon, Marta, Iraide y Pablo, de seis años, debatían su siguiente parada después de disfrutar de un tour con los bomberos. «Estamos cinco adultos y siete niños, porque ha fallado alguno. Hemos llegado cuando han abierto y la idea es estar todo el día», han explicado las mujeres.

La estrategia de acudir el primer día sigue siendo una de las mejores para evitar las temibles colas. Hoy no ha sido necesario esperar demasiado para disfrutar de las barracas del pabellón 5, ni de las propuestas y talleres del 3. Como en años pasados, los bomberos, precisamente, han sido una de las paradas predilectas de muchos asistentes. «Aquí les ofrecemos un circuito para que se entretengan, pero también para que conozcan las labores que realizamos y que se les quede cómo deben actuar en caso de un incendio», ha detallado uno de los bomberos que han ejercido como monitores, Lander Astorkiza, del parque Artaza de Leioa. Subirse al camión, vestir el buzo amarillo y calarse el casco ha sido una de las diversiones preferidas por los pequeños.

Los primeros días del PIN, que coinciden con los últimos del calendario escolar, siempre se repiten las visitas escolares. Uno de los centros que ha permanecido fiel a esta tradición fue el colegio El Carmelo, de Amorebieta. «Hemos venido con 161 alumnos de entre 6 y 12 años», han detallado dos docentes, Joseba Betzuen y Lidia Berrio.