El lehendakari se reúne con los familiares de Alberto Sololuze
Los allegados de Joaquín Beltrán no acudieron al encuentro molestos por enterarse del hallazgo del hueso por los medios de comunicación
El lehendakari se reunió en la mañana de ayer en Bilbao con familiares de Alberto Sololuze, uno de los dos trabajadores del vertedero de Zaldibar que permanecen desaparecidos desde el incidente, ocurrido el 6 de febrero. El encuentro, que se celebró en privado en el centro de coordinación de SOS Deiak, fue convocado de urgencia en la noche del domingo tras la aparición horas antes de un hueso humano envuelto en ropa en la zona de la báscula de la escombrera, precisamente donde desarrollaba su labor profesional una de las víctimas.
Publicidad
A la reunión acudieron la viuda y la hija de Alberto, entre otros familiares del operario. También participó la consejera del departamentos de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, y de Medio Ambiente del Gobierno vasco, Iñaki Arriola. En principio, se había convocado para informar de primera mano sobre los detalles del hallazgo y sobre el proceso que se abre a partir de ahora. Por ejemplo, cuántos días se puede tardar en extraer el perfil genético del hueso encontrado el domingo. La previsión, en este sentido, es que los resultados estén listos en unos días al tratarse de un asunto al que se ha dado máxima prioridad.
Los familiares de Joaquín Beltrán decidieron no acudir al encuentro por el malestar que les produjo que el domingo «no se comunicase» a las familias la aparición del hueso hasta pasadas las 10 de la noche. Según fuentes de su entorno, los allegados de las víctimas tuvieron conocimiento del hallazgo, que se produjo en torno a las 17 horas de la tarde, a través de los medios de comunicación.
Y la primera llamada que recibieron, insisten las fuentes consultadas, fue para convocarles para la reunión de ayer en el centro de Txurdinaga. Algo que les molestó bastante. Básicamente, porque el telefonazo se produjo después de que altos responsables del Gobierno vasco ofreciesen horas antes una rueda de prensa para informar sobre la aparición del hueso. Visiblemente molestos, los allegados de Joaquín dijeron a los interlocutores del Gobierno vasco que no necesitaban reunirse para conocer las novedades del rescate y que podían comunicárselas por teléfono.
Otros encuentros
Desde que se produjo el derrumbe, el lehendakari ha celebrado diversos encuentros con los familiares de las víctimas. Uno de ellos, además, también estuvo rodeado de polémica. Ocurrió el 13 de marzo. El hermano y la cuñada de Joaquín Beltrán abandonaron la reunión tras mantener una «fuerte discusión» con Urkullu y algunos altos cargos del Gobierno vasco. La controversia se centró en el lento desarrollo del operativo de rescate, que derivó en una bronca posterior sobre quién tenía la responsabilidad del derrumbe.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión