El albergue de Altamira estrena el primer 'coliving' de Euskadi para jóvenes

En un principio, tendrá doce plazas en ocho habitaciones que ocupan una de las plantas del albergue. Además, los jóvenes tendrán acceso a zonas exclusivas, entre ellas despachos y salas de reuniones en el edificio anexo para trabajar con internet de alta calidad. Podrán utilizar la cocina o comprar comida para llevar en el propio recinto.

Las plazas podrán ampliarse a 24 en una fase posterior. La próxima semana llegará alguno de los primeros inquilinos, aunque se prevé que el grueso de los ocupantes aterricen en julio. Tendrán el permanente asesoramiento de un trabajador de Bilbao Hostel, que les enseñará a cómo moverse por la ciudad o les invitará a participar en las actividades del barrio. Se calcula que las estancias que demanden para materializar sus proyectos serán de corta duración, de entre dos semanas y tres meses.

El precio de la habitación oscila entre 176 y 213 euros semanales, y entre 594 y 737 por un mes, con desayuno, en función de si es doble o individual, y servicio de limpieza incluidos. Bilbao Hostel, gestionado por la fundación Suspertu, pretende reciclarse tras la crisis del coronavirus. La directora, Toñi Bueno, explicó que la iniciativa se puso en marcha por la demanda de un servicio de este tipo en la ciudad.

En un principio, las instalaciones tendrán dos años de vida, durante los cuales se analizará su viabilidad. El albergue seguirá disponiendo de otras 142 plazas que se dedicarán a lo de siempre: alojar a turistas y peregrinos. «El equipamiento permitirá atraer talento y es una pieza más en nuestro objetivo de convertir Bilbao en una ciudad universitaria», resumió este jueves el alcalde, Juan Mari Aburto, que visitó las instalaciones junto al concejal Xabier Otxandiano.